El Valencia Basket comunicó este martes que el base Sam Van Rossom ha sido intervenido quirúrgicamente “con éxito” para limpiar la rodilla derecha, aunque no ha comunicado oficialmente un plazo de recuperación, del que en parte depende si realiza o no algún movimiento en el mercado para cubrir su ausencia.
No obstante, según pudo saber EFE por diversas fuentes, en el mejor de los casos el belga necesitará al menos entre dos y tres meses para volver a competir tras esta intervención. De momento, el Valencia ha recuperado al base de la cantera Guillem Ferrando, al que había cedido al Melilla.
El doctor Ignacio Muñoz, jefe de los servicios médicos del Valencia Basket, fue el encargado de realizar la intervención y explicó que se trataba de una lesión condral y que la objetivo era extraer cuerpos libres de su rodilla derecha.
"Las lesiones de cartílago en la zona de Sam son muy frecuentes en el baloncesto y la mayoría de las veces son asintomáticas. Sin embargo, cuando empiezan a dar síntomas como ha ocurrido en el caso de Sam, es porque se liberan fragmentos de cartílago, que son inestables en la zona de la articulación”, explicó en declaraciones facilitadas por el club.
“La cirugía en estos casos es necesaria, encaminada a limpiar esos fragmentos y estimular la regeneración del cartílago. Esta regeneración es extremadamente variable según el paciente, por lo que será la evolución del jugador la que determine el plazo de recuperación", añadió.
