De esta manera inicia Ricardo Tomillo su emotivo ‘Pregón de la Santina’ que dió en el Centro Asturiano de Buenos Aires el 14 de septiembre, con ocasión del 1286 aniversario de la gesta de Covadonga. Durante dos largos meses recorrió Tomillo, con su amada Noemí, la tierra querida de Argentina, como "embajador honorario" de Asturias y, en parte, de Torremolinos, que es su segunda patria después de la asturiana Turón.
La celebración de este 1286 aniversario por parte de los asturianos y descendientes de asturianos que residen en Mar del Plata revistió una solemnidad sin precedentes. Jamás se había celebrado en el Centro Asturiano de Buenos Aires una fiesta típica de tal magnificencia y emotividad. El pregón, ilustrado con imágenes de Asturias proyectadas en una pantalla gigante, fue precedido por la espectacular actuación del Coro Minero de Turón, una treintena de voces masculinas que sonaron grave y magistralmente y que recibieron ovaciones cálidas y apoteósicas como no se recordaban haber escuchado en el asturianí recinto de Mar del Plata.
Recalcó Tomillo en su pregón que "Covadonga… llena de evocación la fantasía de los asturianos. Covadonga no es solo paisaje, ni geografía, ni siquiera historia de España; es… leyenda, es devoción religiosa y patriótica. Para los astures es un recuerdo infantil convertido en íntima, campestre e inédita poesía. Es un sueño de piedra sobre el que tiene la Santina su altar de caliza, su trono forestal de hayas, fresnos y cerezales. A Covadonga no se viene a buscar historia, se viene a orar o a soñar".
El auditorio en pleno se sintió mental y físicamente transportado a las Asturias, a medida que el entusiasta pregonero desgranaba las hojas de su pregón y la gran ventana de la pantalla electrónica se iluminaba con nostálgicas vistas de la Tierrina. Incluso se sintieron los oyentes transportados al año 722, cuando Don Pelayo y un puñado de valientes asturianos protagonizaron la heroica gesta cuya conmemoración ahora tenía lugar, l286 años después.
Tras la actuación del grupo folklórico de baile ‘Covadonga’, y concluída la ceremonia con la correspondiente entrega de placas y distinciones con que la dirección del Centro Asturiano bonaerense distinguió a pregonero y amenizadores, todos los presentes compartieron un almuerzo consistente en el típico plato de ‘Fabada Asturiana’, regado con la oportuna ‘sidrina’.
Días después del singular acontecimiento, Ricardo Tomillo fue entrevistado por la famosa cadena ‘Radio Diez’, una de las principales del país. De la entrevista destacamos frases como "Olvidarse de Asturias fuera de ella es imposible" y "Cuando no estamos físicamente en Asturias, la idealizamos". Hablando de los cerca de cien centros asturianos repartidos por el mundo, Tomillo manifestó que "los centros asturianos son el cordón umbilical que nos unen a nuestra tierra".
Torremolinos también ocupó su lugar dentro del programa radiofónico de la célebre cadena de Mar del Plata, donde Tomillo vino a enfatizar resumidamente que sin el "corazón de la Costa del Sol" no puede tener vida el turismo. Su larga experiencia de 44 años en estos soleados lares, donde fijó su definitivo residir, le hizo exclamar ante la audiencia: "Si hay que elegir un lugar para vivir, ése es Torremolinos". Sin olvidarse de Asturias, claro.
Importantes personalidades que asistieron a la celebración agradecieron por escrito al presidente del centro asturiano argentino tan gentil invitación, a la par que hacían llegar sus respectivas felicitaciones a Ricardo Tomillo. Destaca la misiva dirigida por la Concejala de la Intendencia (Alcaldía), Sra. Marcela Amenabar, en la que, tras manifestar que su abuela era asturiana, concluye: "Ruego haga llegar al Sr. Tomillo mi afectuoso saludo a través del cual le manifiesto mi deseo de que continúe la divulgación de la asturianía". En similares términos se expresaron las demás personalidades.
Asturias, hermanada con Torremolinos, ha sido, en la persona y el pregón de nuestro distinguido Ricardo Tomillo, la estrella polar de los asturianos de Buenos Aires en este 1286 aniversario de la gesta de Covadonga.