Estados Unidos informó este martes de que una maniobra "insegura" y "no profesional" de dos cazas rusos les ha obligado a derribar un dron estadounidense que estaba operando sobre el mar Negro.
El suceso tuvo lugar hacia las 07.03 de la mañana hora local (06.03 GMT) y según precisó el mando europeo de Estados Unidos en un comunicado su dron estaba efectuando una operación rutinaria cuando fue interceptado y golpeado por un caza ruso, lo que llevó a las fuerzas estadounidenses a derribarlo en aguas internacionales.
El mando europeo de Estados Unidos precisó que el caza ruso, un Su-27, había golpeado la hélice de su MQ-9. Varias veces antes de esa colisión, los aviones rusos había arrojado combustible y volado frente al dron "de forma imprudente, poco profesional y poco ecológica".
"Este incidente demuestra una falta de competencia además de ser inseguro y poco profesional", apuntó su nota.
El general James Hecker, comandante de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa y África, dejó claro que Estados Unidos y sus aliados "seguirán operando en el espacio aéreo internacional" y pidió a los rusos que actúen "con profesionalidad y seguridad".
Su comunicado recordó que lo sucedido sigue una tendencia de "acciones peligrosas" emprendidas por pilotos rusos cuando interactúan con aparatos estadounidenses o de sus aliados en el espacio aéreo internacional, incluido sobre el Mar Negro.
Este comportamiento, se destacó, "podría llevar a un error y a una escalada no intencionada".
Estados Unidos recordó que sus fuerzas aéreas vuelan de forma habitual sobre territorio soberano europeo y el espacio aéreo internacional en coordinación con los países correspondientes y de acuerdo a la legislación internacional.
El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, informó del incidente al presidente estadounidense, Joe Biden, este martes por la mañana, dijo a la prensa John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca.
Kirby explicó que este tipo de colusiones no son inusuales y que, de hecho, ha habido varias "en las últimas semanas", pero sostuvo que esta es "destacable" por lo "insegura" y "poco profesional" que fue.
El Departamento de Estado prevé ponerse en contacto con las autoridades rusas para manifestarles "expresa y directamente" la preocupación de Washington por lo sucedido, añadió el portavoz presidencial en su comparecencia.