Juan Carlos I cumple este viernes nueve años desde que abdicó en su hijo Felipe VI sin visos de plantearse su regreso definitivo a España tras decidir mantener su residencia en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos), donde se instaló en agosto de 2020.
Don Juan Carlos, de 85 años, protagonizó ayer, jueves, su última aparición en público junto a la reina Sofía en Amán, la capital de Jordania, donde asistió a boda del príncipe heredero del reino hachemita.
La imagen más llamativa fue en la que aparecía sentado en una silla de ruedas empujado por un asistente durante la llegada de los invitados a la ceremonia debido a sus problemas de movilidad.
Es la segunda ocasión en la que se ve al rey emérito en una fotografía en silla de ruedas, después de la que distribuyó el Palacio de la Zarzuela en mayo de 2018 tras un encuentro familiar, un mes después que se le sustituyera la prótesis de la rodilla derecha.
A finales del pasado abril, se cumplieron mil días de su marcha a Abu Dabi, donde don Juan Carlos tiene intención de seguir residiendo, como comunicó en marzo del pasado año cuando el Tribunal Supremo archivó las investigaciones sobre sus irregularidades fiscales y su patrimonio en el extranjero.
Desde su traslado al emirato, ha visitado España en dos ocasiones, en mayo de 2022 y a mediados del pasado mes de abril, cuando Felipe VI se enteró por la prensa de su llegada.
Desde la abdicación y, en especial, desde 2019, cuando empezaron a aflorar noticias sobre los negocios ocultos de don Juan Carlos en el extranjero y decidió apartarse de la vida pública, ha habido un alejamiento de Felipe VI con su padre.
Ambos han coincidido en dos ocasiones desde su salida de España: en el funeral de Isabel II en Londres el pasado mes de septiembre y en enero de este año en Atenas en el entierro del exrey Constantino de Grecia.
En el entierro del hermano de la reina Sofía en el cementerio de Tatoi, se vieron unas imágenes en las que don Felipe se despedía de su padre con dos besos y un abrazo.
El pasado miércoles, Felipe VI le mencionó en su intervención en un foro empresarial iberoamericano, en una de los pocas ocasiones en las que el monarca se ha referido a don Juan Carlos en los últimos tres años.
Al hablar de quiénes le habían inculcado su pasión por América Latina, don Felipe dijo: “Una parte me viene por herencia familiar y por la influencia también del rey Juan Carlos”.
A pesar del archivo de su caso por parte de la Fiscalía, el rey emérito ha seguido siendo objeto de debate por noticias como la que se publicó en abril de que Alejandra de Rojas era su hija, como se publicó en un libro.
Don Juan Carlos desmintió la información a través de una declaración a EFE y reclamó “respeto a la verdad y al honor".