El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Córdoba, Antonio Hurtado, ha recriminado este domingo las afirmaciones del alcalde de Córdoba, José María Bellido, acerca de las 513 hectáreas de zonas verdes y los 15 metros cuadrados de zona verde por habitante al considerar que "en gran parte son auténticos eriales, sin árboles, sin sombras y sin césped".
Hurtado ha pedido al gobierno municipal, según una nota de este partido, que "se centre en la inversión para regenerar nuestro ecosistema urbano" para que "se implique en la renaturalización de Córdoba y hacer de Córdoba una ciudad oasis"
Ha argumentado que "para ello, es necesaria la plantación de árboles, uno por persona, la adecuada elección de especies, la poda correcta y periódica, la correcta conservación y mantenimiento para que estén saludables y podamos disfrutar de sus sombras, oxígeno y belleza".
Los datos según Hurtado son muy elocuentes: 5.130.000 metros cuadrados de zonas verdes y 85.000 árboles, serían 0,01 árbol por metro cuadrado de zona verde los que hay en Córdoba.
"La realidad de nuestro ecosistema urbano es la escasez de árboles, unos 85.000, se están haciendo talas agresivas, muchos de ellos están enfermos, se han tapado los alcorques, no tienen árboles o tienen tocones, otros no se talan y se meten en las viviendas, otros sufren estrés térmico, en definitiva, una nefasta gestión de nuestra masa arbórea", ha señalado el edil socialista, quien ha añadido que "los árboles urbanos aportan beneficios que son dos o tres veces más que la inversión en su plantación y cuidado".
El portavoz socialista ha añadido que "se haga una importante inversión en los próximos años en repoblación, huertos escolares, microbosques y en huertos urbanos, así como un plan de revisión del estado de nuestro arbolado y la creación de un inventario para hacer una buena gestión de este importante patrimonio natural".
Hurtado ha señalado que "debemos concienciarnos y crear una cultura del árbol, ya que actúan como filtro contra la contaminación, absorben el dióxido de carbono, principal causante del calentamiento global, a la vez que liberan oxígeno, también reducen la contaminación acústica, aumentan la biodiversidad urbana, contribuyen a la regulación térmica y pueden ayudar a enfriar el aire entre dos y ocho grados, así como también regulan el flujo del agua y desempeñan un papel clave en la prevención de inundaciones y en la reducción de riesgos de desastres naturales".
"Los árboles nos ayudan a mejorar la salud física y mental", ha remachado su argumentación el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Córdoba.