Drogaba a mujeres jóvenes a las que luego grababa mientras se producían abusos sexuales con ellas inconscientes. Es una historia de abuso machista que, desgraciadamente, en estos tiempos hemos oído demasiadas veces. Pero que en el caso que saltó a la luz este lunes en Málaga, tiene como detenido por tales prácticas a un sacerdote. Porque la Policía Nacional ha detenido en su localidad natal, Vélez-Málaga, a un cura de 34 años al que acusa de agredir sexualmente al menos a cuatro mujeres a las que sedaba y grababa.
Se trata del párroco que hasta hace pocas fechas, oficiaba en las localidades de Yunquera y El Burgo, del que, fuentes de la investigación han señalado a EFE, que, una vez ya detenido, habría suministrado a las víctimas algún tipo de sustancia que anulaba su estado de consciencia para perpetrar las agresiones.
El sacerdote, natural de Vélez- Málaga, ha sido detenido en este municipio de madrugada, tras la investigación llevada a cabo por la Policía Nacional que determina que, presuntamente, agredía sexualmente a las mujeres tras sedarlas, por los que ellas no eran conocedoras de lo sucedido.
Abusos en su círculo de amistades
Las mujeres, pertenecientes a su círculo de amistades, fueron agredidas en diferentes años y localidades, y no eran conscientes de haber sufrido ningún delito social, según informaron desde la Comisaría provincial de Málaga. Los agentes han averiguado que las agresiones sexuales cometidas sobre ellas, se habían levado a cabo de forma continuada con ocasión de viajes en grupos de amigos, entre los que se encuentra el sacerdote arrestado. Este, habría suministrado a las víctimas algún tipo de sustancia que anulaba u estado de consciencia para poder llevar a cabo las agresiones sexuales.
La investigación arrancó el pasado mes de agosto cuando una mujer, que aseguró ser la pareja sentimental del párroco detenido, denunció ante la Unidad de Familia y Atención a la Mujer (UFAM) de Melilla que había localizado en el domicilio que compartía con él un disco duro que contenía fotografías y vídeos donde aparecían varias mujeres semidesnudas, dormidas o bajo los efectos de algún sedante a las que un hombre les realizaba todo tipo de prácticas sexuales.
Investigación minuciosa
Tras el exhaustivo análisis del material gráfico, los investigadores policiales observaron que en algunos de los vídeos aparecía el detenido realizando prácticas sexuales sobre diferentes mujeres en estado de inconsciencia, prácticas que grababa. Los agentes lograron identificar a cinco víctimas que manifestaron que desconocían la existencia de las grabaciones y que no eran conscientes de haber sido víctimas de ningún delito de naturaleza sexual.
Con toda la información recabada, la Policía estableció el correspondiente dispositivo en torno al domicilio del detenido, que culminó con el arresto de este lunes. Tras el mismo, se practicó una entrada y registro en el mismo, en el que se intervino diverso material tecnológico pendiente de análisis. Una vez puesto a disposición judicial, se decretó su ingreso en prisión preventiva.
Pero el caso, no se ha cerrado todavía, ya que los agentes policiales no descartan que haya más víctimas tanto en Melilla, como en Málaga y en Córdoba, lugares en los que el ahora arrestado por los presuntos abusos sexuales, ha residido, de manera que se sigue con el análisis del material que se incautaron en su actual domicilio de Vélez-Málaga tras su detención.
En resumen, fuentes de la investigación han indicado a EFE que el detenido, que fue ordenado sacerdote en 2017, fue párroco en una iglesia de Melilla y, a comienzos de este año, fue destinado a la Diócesis de Málaga, donde han estallado los hechos.
Consternación y sorpresa
El pueblo de Yunquera y el de El Burgo se encontraban ayer consternados tras la detención del sacerdote malagueño de 34 años adscrito a este municipio por presuntamente agredir sexualmente a al menos cuatro mujeres a las que sedaba y grababa.
Los vecinos del municipio de la Sierra de las Nieves, se despertaron con la sorpresa de la detención del cura después de que hace unas semanas comunicara que por motivos personales se tenía que ausentar y no iba a seguir oficiando la misa, según explicó a EFE el alcalde José María Rodríguez. “Es un palo, una persona tan joven, tan cercana”, lamentó el regidor, que reconoció que estaban muy contentos de que hace unos meses llegara al pueblo un nuevo cura, que podía traer nuevas ideas, propuestas e intenciones. Rodríguez explicó que no solo estaba en este municipio, también era cura en El Burgo, donde también ha sorprendido a todos los vecinos.
"Desde el Ayuntamiento estamos abiertos a colaborar con la Guardia Civil para ver las imágenes y si reconocemos a alguna afectada", ha señalado el regidor, que ha admitido que el detenido "últimamente estaba un poco nervioso porque veía que el caso estaba encima de la mesa".
Una vecina de Yunquera ha dicho a EFE que cuando dijo que se tenía que ausentar por motivos personales creyeron que se debía a algún asunto en Melilla, ya que anteriormente estuvo destinado allí, “nadie se imaginó lo que estaba pasando”, ha asegurado.
Respecto al contacto que ha podido tener con las mujeres de Yunquera, el alcalde sostuvo que cree que ha sido poco y que por tanto esperan que no haya ninguna víctima en la localidad.
“Nos lo hemos tomado muy mal - asegura otra vecina - nadie se puede imaginar una cosa así” y lamentó que no hubiera colgado los hábitos antes “porque gente así hace mucho daño a la Iglesia, por cuatro personas de este tipo se mancha toda la institución”, se quejó.
El sacerdote veleño es hijo de una monja clarisa que durante años estuvo en Vélez-Málaga, posteriormente la mujer permaneció como catequista hasta que nació el ahora detenido y comenzó a trabajar como educadora en una guardería, indicaron los vecinos.
Mientras tanto, el Obispado de Málaga señaló su colaboración con la justicia en la investigación en este caso y ha expresado su condena “más profunda y contundente contra cualquier tipo de vejación o abuso a la mujer”. Desde la Diócesis malagueña a través de un comunicado, precisan que “desde que se conocieron los hechos, este Obispado colabora con los requerimientos de la justicia y continuará ofreciendo su cooperación para cuantas gestiones sean necesarias con el fin de facilitar la investigación que aclare los hechos”.
Además, dicen sentir “profundamente el daño que esta situación implica” y estar “conmovidos por el mal infligido”. “No podemos más que manifestar nuestro dolor como comunidad católica comprometida con el cuidado y el servicio a toda la sociedad, especialmente a los más débiles y necesitados”, apuntaron.
Por su parte, el Ayuntamiento de El Burgo ha condenado los presuntos abusos sexuales a varias mujeres cometidos presuntamente por el sacerdote destinado en los últimos meses en la localidad de la Sierra de las Nieves, a la vez que ha expresado su apoyo y cercanía hacia las víctimas.
En un comunicado de prensa publicado en su perfil en redes sociales, el Consistorio asegura "no tener conocimiento por parte de las autoridades competentes que exista algún dato para pensar que haya ocurrido en el entorno de nuestro pueblo cualquiera de las acciones denunciadas".
Desde el Ayuntamiento también manifiestan haberse puesto en contacto con el Obispado de Málaga "para conocer más datos sobre dicha denuncia", y concluyen señalando que ponen "todos los servicios ofrecidos por nuestra institución a disposición de los burgueños que pudieran sentirse interpelados en lo ocurrido de una u otra forma".
