El tiempo en: Vélez-Málaga
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Punta Umbría

Juana Castro, en poesía, y Piglia, en narrativa, Premios de la Crítica 2011

Estos premios de gran prestigio y sin dotación económica los concede la Asociación Española de Críticos Literarios (AECL) desde 1956.

Publicidad Ai
Publicidad Ai
El escritor argentino Ricardo Piglia, por su novela "Blanco nocturno", y la poeta cordobesa Juana Castro, por "Cartas de enero", han ganado en Cáceres el Premio de la Crítica literaria en las modalidades de narrativa y poesía, respectivamente.

Estos premios de gran prestigio y sin dotación económica los concede la Asociación Española de Críticos Literarios (AECL) desde 1956 y se otorgan a los mejores libros de narrativa y poesía publicados en España a lo largo del año anterior tanto en castellano como en gallego, euskera y catalán.

En lengua catalana los vencedores han sido Jordi Puntí por "Maletes perdudes", en narrativa, y Anna Montero por "Terangines", en poesía, mientras que el galardón en lengua gallega ha sido para Víctor Freixanes, por "Cabalo de Ouros", en narrativa, y para Marga do Val, por "Acidade sen roupa au sol", en poesía.

El premio en la modalidad de narrativa en euskera ha recaído en la escritora Arantxa Urretavizkaya, por "3 Mariak", y en poesía, en Miren Agur por "Bitsa eskuetan".

En la comparecencia pública para leer el fallo del jurado, Ángel Basanta, presidente de la AECL, ha considerado que los ganadores "lo son en justicia".

Basanta ha aseverado que el Premio Nacional de Crítica "es sin duda el Premio más prestigioso de la literatura española, y aunque no tiene dotación económica, cualquier escritor es el galardón que quiere tener".

En cuanto al reconocimiento conseguido por Piglia, Basanta ha comentado que para él representa "una alegría que el Premio viaje a Argentina, como los emigrantes hicieron antes".

El propio Piglia, que recibió la noticia de madrugada -por el cambio horario- en su ciudad, Buenos Aires, ha comentado a EFE estar "contentísimo" con el premio: "uno se pone más contento cuando le premian los colegas y yo considero a los críticos parte de la literatura. Es una alegría que sean ellos quienes reconozcan el trabajo".

"Estoy asombrado -ha añadido- porque es una novela muy argentina que sucede en un pueblo de La Pampa, una historia que en cierto sentido es autobiográfica, ya que está inspirada en un primo mío que puso una fábrica en el campo; no le fue nada bien, pero trató de resistir, para mi reaccionó de una manera admirable", ha señalado el autor del ensayo "El último lector".

"La imagen de él, allí encerrado en su fábrica, sólo, construyendo objetos para los que no estaba preparada la realidad, con esa perseverancia, fue siempre un motivo de inspiración, y sobre esa imagen -puntualiza-, por ese recuerdo, escribí la novela".

Junto a Piglia, novelistas de enorme prestigio como Cela, Delibes, Matute, Torrente Ballester, Javier Marías, Marsé, Muñoz Molina o Umbral, y poetas como Blas de Otero, Aleixandre, Rosales, Hierro o Cabalero Bonald cuentan en sus vitrinas con el celebrado galardón.

También Juana Castro, ganadora del Premio en la modalidad de poesía, ha celebrado en declaraciones a EFE que la crítica premie los poemas de una mujer aún cuando "las experiencias de las mujeres son como cosas de marcianos" para la tradición poética en general.

"No lo esperaba en absoluto, es más tenía confundida la fecha, creí que faltaban aún unos días", ha señalado a EFE la escritora, profundamente emocionada tras conocer que su obra había sido seleccionada por los críticos como la mejor obra poética de 2010.

La escritora cordobesa, que pasaba estos días "una racha mala, física, de salud y de ánimo", ha destacado cómo este premio "ha venido a levantarme, a endulzarme, me ha pasado algo maravilloso justo cuando estoy mal".

"Es muy significativo porque la tradición poética en general no contiene las experiencias de las mujeres, porque la mayoría de los creadores piensan que esas experiencias son cosas de marcianos, les suena ajeno y les suena a no valioso: yo tengo para mí que sí significa cosas importantes", ha dicho a EFE.

Autora de una quincena de libros de poesía, el último "Vulva dorada y lotos" (2009), Castro ha explicado que sus poemas "hablan de la vida y de las mujeres, del mundo y de las mujeres": no podía escribir de otra manera, apunta, puesto que era su manera de pensar, de mirar, de vivir, de sentir y de estar en el mundo.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN