Los hechos se produjeron cuando efectivos del Infoca desplazados al lugar comprobaron cómo estaban surgiendo nuevos focos 24 horas después del incendio, y claramente intencionados.
Los efectivos del Infoca estabilizaron a las 9.40 horas de ayer el incendio que se registró en la noche del pasado martes, alrededor de las 20.40 horas, sobre una superficie de 20 hectáreas de matorral y alcornocal, y en el que las llamas amenazaban con alcanzar las viviendas próximas.
La alarma se generó entre los vecinos, que ya han vivido situaciones similares en los últimos dos años. Muchos de ellos no pudieron dormir en toda la noche, examinando de cuando en cuando la progresión del fuego.
En realidad, las llamas, que se encontraban a unos 200 metros de la urbanización, sólo amenazaron realmente a una vivienda, según señalaron ayer fuentes del Infoca, si bien no hubo que llevar a cabo la evacuación de sus moradores al no aproximarse del todo.
En ello tuvo mucho que ver el efecto del viento de levante, dado que empujó la lengua de fuego más hacia la sierra que hacia las viviendas.
El incendio fue finalmente sofocado a las 9.40 horas, cuando los efectivos del Infoca lograron estabilizarlo. Sin embargo, la Junta dejó ayer desplegado un dispositivo para controlar el posible reavivamiento de las llamas, compuesto por una estación meteorológica, un vehículo de Bomberos y una ambulancia.
Este equipo controló los pequeños focos que se generaron en la mañana de ayer y, cuando los retenes se estaban marchando, dando por controlado el fuego a última hora de la tarde, comenzaron a surgir nuevos focos intencionados, localizando posteriormente la Guardia Civil a un hombre prendiendo fuego en el monte con un artefacto con mecha.
Reincidencia
La urbanización, enclavada en una zona forestal, es considerada como conflictiva por los técnicos contra incendios del Plan Infoca, dependiente de la Consejería de Medio Ambiente.
De hecho, en los últimos dos años se han producido otros cuatro incendios en esta zona, los cuales han creado alarma entre los vecinos, al propagarse las llamas con peligrosidad en zonas próximas a las viviendas.
Esta exposición a los fuegos, que generalmente son intencionados, provocó que los vecinos de El Cuartón pidieran a la Consejería de Medio Ambiente hace años que les proporcionara herramientas con los que poder defenderse, por lo que se les elaboró un plan de autoprotección contra incendios.
Estos planes, comunes a otros destinados a urbanizaciones enclavadas en zonas forestales, se centran en las fórmulas de prevención (limpieza, residuos...) y en cómo actuar cuando un incendio forestal se aproxima a la zona de viviendas.
