La enmienda fue aprobada por “mayoría evidente” gracias a los votos de la bancada pro gubernamental que cuenta con 146 de los 167 escaños de la AN.
El principal argumento esgrimido por los diputados oficialistas fue que la enmienda “amplía los derechos políticos de los venezolanos”, porque les da la opción de reelegir cuantas veces quieran a gobernantes que hayan hecho bien su trabajo.
Por su parte, los parlamentarios de la oposición aportaron como postulado de fondo que la enmienda no trata de ampliar las potestades de los ciudadanos, sino que busca “institucionalizar el monopolio del poder”.
Los cambios aprobados afectan al artículo 230 de la Constitución refrendada en 1999, que se refiere al presidente, y también a los artículos 160 (gobernadores), 162 (consejos legislativos), 174 (alcaldes y concejales) y 192 (diputados).
Varios diputados oficialistas denunciaron la “manipulación” que se ha tejido en torno a la enmienda al presentarla como un mecanismo de “reelección indefinida” del presidente venezolano, Hugo Chávez, y del resto de cargos a los que afecta la propuesta de cambio.
“Es mentira que estemos discutiendo la reelección indefinida. Lo que estamos proponiendo es que quienes ejercen esos cargos tengan la posibilidad de que el pueblo los reelija”, planteó Luis Gamargo, del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), que dirige Chávez.
Si se aprueba la enmienda, Chávez podrá presentar su candidatura en los comicios presidenciales de diciembre del 2012.