La secretaria general y portavoz municipal del PSOE en Villanueva del Duque (Córdoba), María José Andrada, ha anunciado este viernes que optará a liderar el partido en la provincia, presentándose como una "tercera vía" frente los dos candidatos ya conocidos, el actual secretario general del PSOE en la provincia, Juan Pablo Durán, y el exdelegado de Cultura de la Junta en Córdoba, Joaquín Dobladez.
En rueda de prensa, Andrada, quien ha dicho lamentar que no le permitiera la ejecutiva provincial celebrar su encuentro con los medios de comunicación en la sede provincial del partido, habiendo tenido que hacerlo en la sede de la Agrupación de Valdeolleros, también en Córdoba capital, ha explicado que, tras acudir "a las sesiones de debate" de cara al Congreso Provincial del próximo 14 de julio, ha podido comprobar que "ninguna de las dos candidaturas" ya conocidas "promoverán el cambio y la renovación que precisa el partido", ya que "el PSOE, en los últimos tiempos, no ha sabido dar respuesta a los retos que plantea la sociedad".
Prueba de ello, según ha detallado, es que en estos últimos cuatro años el PSOE ha perdido el gobierno de la Diputación, ha tenido unos pobres resultados en las municipales de la capital y "cada vez tenemos menos militantes", cuestiones de las que ha responsabilizado a la actual ejecutiva provincial, con lo que ha reconocido que se siente corresponsable de su gestión, dado que ella también forma parte de la ejecutiva provincial, aunque entiende que ella puede ahora ofrecer una alternativa que permita al PSOE "recuperar la credibilidad" y también "la confianza" de los ciudadanos, en base a la "concienciación, movilización y motivación de todos los militantes".
Esa es una de las consecuencias del lema en el que basa su proyecto Andrada, 'Hemos asistido, pero ahora toca participar', ofreciendo a la sociedad "transparencia" y "coherencia", lo que conlleva "eliminar intereses creados, porque no podemos tener un partido hipotecado", salvo para dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos.
Ello requiere también "capacidad y honestidad" en los cargos públicos y que "la política no se entienda como una profesión". De ahí que sea preciso que a los puestos de responsabilidad del partido se acceda en base a criterios de "merito y capacidad", aunque no en base a "la titulitis", buscando "nuevas formas de hacer política", con "caras nuevas", porque "debe primar la ilusión, el esfuerzo y el convencimiento de que se puede lograr ese cambio deseado con una renovación".
