La plantilla de Mayse, empresa concesionaria del servicio de limpieza de colegios y edificios municipales, conformada por 94 personas, indica que vuelve a encontrarse en una situación difícil, tras conocer que la empresa no tiene liquidez para abonar la paga extraordinaria que corresponde a este mes de julio, según les han comunidado desde la entidad.
Tras numerosas protestas y un difícil año para estas trabajadoras, la plantilla se ve de nuevo abocada a recurrir a la denuncia pública del incumplimiento de sus derechos como trabajadoras, que han estado recibiendo sus nóminas de forma escalonada, llegando incluso a tener que recurrir a la huelga ante el desprecio y ninguneo del equipo de Gobierno, destacan.
La indignación de las trabajadoras ha aumentado tras haberse reunido estos días atrás con la concejal de Economía, Leocadia Benavente, “quien se ha limitado a asegurar que no hay dinero, que no sabe cuándo habrá y que, cuando haya, habrá que repartirlo”, añaden. Por lo que no les ha dado esperanza ninguna, destacan, pues como señalan las trabajadoras “ha llegado a decir que si la empresa no tiene pulmón para soportar la carga de las nóminas, que abandone el servicio”.
El comité de empresa manifiesta su máximo rechazo a estas declaraciones, y que asegura que “el Ayuntamiento se está gastando dinero en asuntos que no son prioritarios y somos muchos los trabajadores que sufrimos esta falta de previsión del equipo de Gobierno, que dice que no tiene dinero cuando se están gastando dos millones de euros en la construcción de la pasarela, que no es una infraestructura que sea especialmente necesaria”.
Según saben por la propia empresa, el Ayuntamiento debe a Mayse más de 800.000 euros, por lo que no tiene capacidad alguna para abonar las nóminas. Las trabajadores insisten en que no quieren ser ariete entre el Consistorio y Mayse, de manera que rechazan que se les utilice en la polémica, ya que se ocupan de hacer su trabajo a diario con rigor y con la máxima profesionalidad.