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San Fernando

El BM San Fernando pierde por siete en Sevilla

El conjunto isleño se vio desbordado en el tramo final del encuentro por el Bm Lauro, que se llevó la victoria por 29-22.

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Volvió el equipo isleño a tropezar en la misma piedra al igual que la semana anterior y echó por tierra en los últimos 10 minutos todo el buen trabajo realizado anteriormente. Un conjunto rojillo con numerosas bajas, hasta 7 jugadores no pudieron viajar por lesiones o motivos laborales, pagó en los minutos finales el esfuerzo realizado y el contar con un banquillo muy mermado de efectivos.

Aunque el comienzo de los jugadores de Jorge Navarrete no fue nada bueno,  3-0 en el minuto 5, un parcial de 0-5 les metió pronto en la dinámica del choque. Los isleños trabajaban bien en una cerrada defensa 6:0 y detenían las acometidas de los locales, sobre todo de la primera línea que era lo más peligroso del rival. Lastima que al buen trabajo defensivo de los cañaíllas no les hubiera acompañado un mayor acierto en ataque, donde se erraron claras oportunidades de gol, sobre todo por precipitación y errores de lanzamiento. Los sistemas defensivos de ambas escuadras se imponían claramente al poder anotador.

Ninguno de los dos equipos tenía un dominio claro del juego por lo que el luminoso se mantenía muy igualado, hasta que en los minutos finales de este primer periodo los loreños consiguieron una ventaja de 2 goles, 12-10.

Poco cambió el panorama el el segundo periodo, ambos equipos mantenían el 6:0 defensivo, ya que ninguna de las dos escuadras tenía jugadores que lanzaran de fuera con acierto, por lo que las penetraciones eran muy difíciles. El marcador tenía poco movimiento y las diferencias eran mínimas, 20-19 en el minuto 50.

El desgaste físico del paso de los minutos empezó a pasar factura a los isleños, que apenas tenían recambios en el banquillo y varias pérdidas de balón provocó que los sevillanos alcanzaran la máxima renta, 25-21. Jorge Navarrete cambió su defensa y la hizo más abierta y presionante para intentar cortar las líneas de pase y robar algún balón, pero el nuevo sistema defensivo no dio frutos y los locales se marcharon definitivamente en el marcador hasta el 29-22 final. Resultado inmerecido y engañoso para los rojillos, tras ver como había transcurrido todo el choque.
 

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