Después de que en 1991 el Ayuntamiento de Sevilla encargase al artista Julio López Hernández una obra que honrase la figura del poeta hispalense Antonio Machado, dicha obra corona una exposición inaugurada este martes en el espacio cultural Santa Clara y el próximo mes de julio, al término de la muestra, será instalada a los pies del Palacio de las Dueñas, cuna del insigne poeta sevillano.
El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, y el propio artista Julio López Hernández visitaron ayer la muestra Todas las circunstancias son el marco, que se inauguró en el espacio cultural Santa Clara, ubicado en la calle Becas, en el antiguo y remozado convento de Santa Clara.
La exposición, abierta hasta el próximo mes de julio, reúne como explicó el alcalde una “selección” de obras de Julio López Hernández con un “colofón” especialmente relacionado con la ciudad de Sevilla, pues se trata de la obra que el Ayuntamiento hispalense le encargó en 1991 para honrar la memoria y figura del poeta Antonio Machado.
De bronce
La obra en cuestión, fundida en bronce, está formada por un relieve vertical que, entre otras cosas, refleja al propio poeta y a parte del cuerpo de una joven lectora, porque el resto de su morfología se muestra en la segunda parte de la pieza, que a modo de estatua muestra a esta mujer sentada y leyendo un amplio volumen.
El autor de la obra, en ese sentido, ha reconocido que su estilo “figurativo” se deja ver en esta obra que, “por los avatares”, no ha sido expuesta al público hasta ahora, con lo que “el cliente ha sido paciente”. “Machado ha tardado tiempo en encontrar su destino”, dijo.
“Julio López es el máximo representante de la escultura realista que tenemos en España”, enfatizó de su lado el alcalde, explicando que tras la muestra, la pieza será instalada en los aledaños del palacio de las Dueñas, que como casa natal del poeta celebra este año el 75 aniversario de su muerte.
Con este gesto, según el alcalde, la ciudad cumple el deseo de Jesús Aguirre, duque de Alba, al tratarse del promotor inicial de este homenaje gracias al cual “Machado regresa” a la capital andaluza, pues los restos mortales del poeta descansan en el pequeño municipio de Collioure (Francia).
