Al menos 69 personas murieron hoy y otras 144 resultaron heridas en los bombardeos aéreos contra las zonas de Al Ratba y Al Qaem, en la provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak, informaron a Efe fuentes de seguridad locales.
Existe confusión sobre la autoría de estas acciones que, según una fuente de seguridad de Al Ramadi, fueron supuestamente llevadas a cabo por cazas sirios.
Sin embargo, la televisión oficial Al Iraqiya informó de que aviones no tripulados (drones) estadounidenses bombardearon posiciones del grupo extremista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL o ISIS, según sus siglas en inglés) en Al Qaem, sin dar más detalles.
A pesar de que el Gobierno iraquí ha pedido a EEUU que lance ataques aéreos contra los insurgentes, Washington ha dicho públicamente que sigue considerando esa opción y se ha limitado a enviar unos trescientos asesores militares para ayudar al Ejército iraquí.
Según fuentes policiales, cincuenta personas, entre ellas mujeres y menores, murieron y 122 sufrieron heridas en un bombardeo contra una gasolinera en Al Ratba.
Ese ataque también causó incendios en almacenes de gasolina y edificios cercanos, entre los que se encuentra el ayuntamiento de la localidad.
En Al Qaem, junto a la frontera con Siria, un ataque similar contra un mercado popular causó 19 muertos y 22 heridos, además de grandes daños materiales.
El puesto fronterizo y la localidad de Al Qaem, así como las vecinas poblaciones de Raua y Aana, fueron tomadas en los últimos días por insurgentes suníes, dentro de su ofensiva contra el Gobierno del chií Nuri al Maliki.
La provincia de Al Anbar es feudo del EIIL y escenario de una ofensiva del Ejército iraquí que, desde enero pasado, bombardea distintas zonas, sobre todo sus dos principales ciudades, Al Ramadi y Faluya.
Desde el pasado 10 de junio, cuando tomaron Mosul, la segunda ciudad iraquí, los insurgentes controlan distintas partes del país y se han enfrentado a las fuerzas gubernamentales.
El Ejército sirio también combate en su país contra los yihadistas del EIIL, que tienen su principal bastión en territorio sirio en la provincia de Al Raqa, en el norte.