La nueva asociación de ayuda a los niños con alguna disfunción psicomotriz, Difuarcos, pondrá en marcha en septiembre su sede social, en Fuente del Río, al objeto de comenzar a prestar servicio a este colectivo, comenzando por unos veinte menores que, una vez cumplidos los seis años de edad, se han visto obligados a abandonar el Centro de Atención Infantil Temprana (CAIT) Concha Vivas que gestiona la Junta de Andalucía. No obstante, se podrían incorporar nuevos usuarios tanto de la ciudad como de sus barriadas e incluso de municipios cercanos.
Cubriendo por tanto esa importante función social, Difuarcos ha conseguido un estupendo local, para lo que no le ha faltado todo tipo de ayudas, comenzando por la del propio Ayuntamiento, de los padres afectados e incluso del propietario del local, que se han volcado en la ejecución y adaptación que el edificio ha requerido. En este sentido, el centro está prácticamente terminado a la espera de la dotación de mobiliario y del material propio del trabajo con los niños.
El centro prestará una serie de servicios esenciales en la atención a los menores, con la presencia permanente de un logopeda y un terapeuta ocupacional, además de otros profesionales que trabajan en el campo de la discapacidad.
El centro procura, además, hacer más llevadera la vida a las familias afectadas, ya que suelen tener problemas de conciliación de la vida laboral y la atención a sus hijos, como también los hijos de las familias no afectados por discapacidad alguna suelen tener problemas de falta de atención de sus padres, según la realidad que ha constatado la propia asociación Difuarcos. Así, una buena idea ha sido la de poner en marcha una escuela de padres para educarlos en esta dirección.
Otra virtud del centro es que vendrá a evitar los tradicionales desplazamientos a otros centros de la provincia o de la comarca para recibir servicio, evitándose así posibles accidentes y la pérdida de tiempo.
El presidente de la asociación, Ildefonso Virués, ha querido agradecer la ayuda recibida y, de paso, mostrar su ilusión por el proyecto que prácticamente acaba de nacer, no sin recordar algunas de las acciones llevadas a cabo para conseguir fondos, en el caso de un campeonato deportivo que gozó de un éxito social importante.
El alcalde de la ciudad, José Luis Núñez, quiso agradecer durante su visita al local la ayuda social recibida en Difuarcos, especialmente el trabajo de su compañera delegada de Participación Ciudadana, Catalina Pérez, y de entidades como La Caixa que recientemente colaboró económicamente con la asociación. Además, numerosos particulares que incluso no tienen vinculación alguna con casos de discapacidad en sus familias, se han entregado a la colaboración aportando desde materiales hasta su propia formación profesional, como también ha habido afiliaciones totalmente altruistas.
