El delegado municipal de Cultura, José Manuel Lechuga, ha declarado hoy en rueda de prensa que, “según la Delegación Territorial de Cultura de la Junta de Andalucía, la responsabilidad de salvaguardar la ermita Santa Ana corresponde al propietario, y el Consistorio no es dueño de la ermita”. A pesar de ello, destaca que desde el Ayuntamiento se ha colaborado con la Iglesia en diferentes líneas de actuación por conservar el patrimonio”. No obstante, ha añadido que “debe ser la Junta de Andalucía la que, ante la imposibilidad de la Iglesia de asumir ciertos gastos, vele por el patrimonio” y ha lamentado “la falta de coordinación entre la Delegación Territorial de Cultura y los intereses electoralistas de Román en Chiclana”.
Lechuga ha afirmado que “la misma Junta ha declarado quién debe intervenir en la ermita, por lo que José María Román podría haberse ahorrado esa salida de culpar al Ayuntamiento”. Una vez más, el edil declara que “son muchas las equivocaciones que los socialistas están cometiendo en Chiclana, acusando al Ayuntamiento de fallos sobre actuaciones, proyectos y planes como el de empleo, que la propia Junta pone en marcha”.
De esta forna, José Manuel Lechuga ha declarado que con este tipo de actuaciones llevadas a cabo por el líder de los socialistas en Chiclana, “sólo demuestran la intención de hacer daño y de levantar polvareda contra el Equipo de Gobierno”.
Asimismo, ha añadido que “la Junta de Andalucía ha invertido 0 euros, no sólo en cuanto a bienes de la Iglesia, sino, recordamos, con enclaves tan importantes como el yacimiento arqueológico, o el Castillo de Sancti Petri, que sigue esperando un plan que explote todo el potencial turístico y cultural que supondría, y que la Junta no es capaz de sacar a concurso con un proyecto sostenible en el tiempo”.
Además de ello, el edil ha instado a la Junta “a que nombre una sola acción por la defensa del patrimonio que haya llevado a cabo, o en el que haya colaborado”, afirmación por la cual Lechuga ha declarado que “ante tal abandono, no tienen fuerza moral para dar reprimendas a nadie”.
Finalmente, el concejal municipal de Cultura ha afirmado que “desde el Ayuntamiento nos hemos metido en situaciones que no nos correspondían, y vamos a seguir haciéndolo por defender nuestro patrimonio cultural, ayudando algunas veces a la Iglesia, y otras a la Junta, como es el caso del yacimiento, ante la negativa de actuar en él”. Una negativa, en palabras de Lechuga, que “queda patente en muchas otras delegaciones en las que no hacen absolutamente nada”.
