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Jerez

Empezando por el centro

Ese proyecto de ciudad que pedíamos debe pasar forzosamente por la reconstrucción del casco histórico de Jerez

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Ese proyecto de ciudad que la semana pasada pedíamos como necesidad para Jerez debe pasar inexorablemente por la reconstrucción del centro histórico, un centro que va más allá del barrio de San Mateo y que debe ordenar las ideas y las iniciativas para que el comercio retorne a calles como Algarve, de pena, penita, pena..., Francos, por donde da vértigo pasar a media tarde, la propia calle Larga con tantos locales cerrados, Santa María donde la antigua Rianal y otros comercios están cerrados y sus edificios carcomiéndose por las humedades de la falta de vida... y así podríamos seguir y seguir. Hay que dar imagen para que el centro se reencuentre asímismo y, obviamente, todo pasa por una repoblación masiva.Hay calles y calles que prácticamente no tienen vecinos. En Consistorio, por ejemplo, apenas si viven tres o cuatro familias; casi nadie en Larga, en la Plaza de La Yerba dos o tres familias, grandes mansiones de la plaza de La Asunción están cerradas y si ya nos adentramos en ese histórico San Mateo la realidad es clara y contundente. Edificios en ruínas, como el que hay detrás de Comisaría, como los que hay en Juana de Dios Lacoste, obras que se hicieron para acomodo del ocio y que terminaron destruyendo una casa como la del número 2 de la plaza Ponce de León, donde se ubica el colegio de El Salvador, esa plaza de Belén que es una barbaridad en las condiciones en las que se encuentra, la propia  Luis de Ysasi y así podríamos seguir enumerando calles y plazoletas de un Jerez de siempre que necesita una reforma integral y que precisa de la llegada de negocios que le dan actividad al centro, que obliguen a los jerezanos a acudir al centro de su ciudad, a identificarse con su pueblo, con su vida, no a esconderse en sus barrios y aislarse para que el centro sea solo cobijo de los que llegan de fuera y que, en ocasiones, da la impresión que deambulan sin saber a ciencia cierta hacia dónde caminan. Y del tema de las iglesias, de esos templos que se caen, como La Merced, hablaremos otro día, porque los templos deben ser lugares no solo cultuales sino también culturales, porque son patrimonio artístico de la ciudad. 

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