La Policía Nacional ha detenido a la directora de una guardería privada de Jerez como presunta autora material de un delito contra la integridad moral de los niños que acudían a su centro, según informaron ayer fuentes policiales. La investigación que llevó a su detención el pasado miércoles se inició a raíz de la denuncia de una trabajadora de la Escuela Infantil La Casita de La Cartuja, que acusó a su superiora de tratar supuestamente de forma despectiva e inadecuada a los niños.
En su denuncia, según han confirmado fuentes de la investigación, esta empleada aportaba vídeos y, sobre todo audios, que corroboran las duras acusaciones y evidencian los presuntos malos tratos físicos y psíquicos, en los que puede oírse a la directora insultar a los menores. Una compañera ha ratificado su denuncia sobre unos hechos que se estaban produciendo “desde hace varios años”.
A partir de ese momento, los agentes de la Policía Nacional adscritos al Servicio de Atención a la Familia de la Comisaría Nacional de Policía de Jerez se hicieron cargo de las pesquisas, que se han prolongado durante semanas y han culminado en su arresto.
En el curso de sus diligencias escucharon los testimonios de padres y madres de los niños de esta guardería, con sedes en La Cartuja, coordinada por la hija de la denunciada, y Olivar de Rivero -donde la directora pasaba la mayor parte del tiempo- así como de educadores y otras personas relacionadas con la guardería en los que se han recabado “indicios suficientes de delito” para proceder a su detención, que se realizó en la mañana del miércoles.
El fiscal pidió prisión
El mismo día de su detención, la directora de las guarderías fue puesta a disposición judicial tras pasar varias horas en los calabozos de la Comisaría. En ambas instancias, se acogió a su derecho a no declarar. Finalmente, aunque el fiscal pidió prisión, el juez decretó su puesta en libertad con cargos y emitió una orden de alejamiento de las dos guarderías que regenta.
Puestos en contacto con la directora denunciada, fuentes de su entorno declinaron a este periódico hacer “cualquier tipo de declaración hasta que se esclarezcan los hechos y haya una sentencia” y aseguraron que el caso “está en manos de abogados”.
En la jornada de ayer ambas escuelas infantiles, abrieron “con normalidad” sus puertas , según indicaron a este periódico familias usuarias del centro consultadas, que llevaron y recogieron a sus hijos “como cualquier día más ” y no detectaron “nada raro”. Tras hacerse eco de los hechos, desde la Unión de Consumidores de Cádiz instan a que sean investigados a la vez que apelan a la cautela y a que se garantice la protección de los menores en todo momento. Por ello, ponen a disposición de los afectados su gabinete jurídico para ofrecerles asesoramiento jurídico y se personará en la causa en el supuesto de ser solicitado por ellos.
Entre la sorpresa y la preocupación
Como suele ocurrir en los casos en los que hay menores de por medio, la investigación iniciada por el Servicio de Atención a la Familia (SAF) de la Comisaría de Jerez se ha caracterizado por la discreción. Tal es así que la mayoría de los padres con hijos usuarios de estas guarderías se enteraron por la prensa de unos hechos que acogieron entre la sorpresa y la preocupación por la gravedad de las acusaciones.
