El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha reclamado este viernes al PP "lealtad y no uso partidista" del pacto antiyihadista y ha defendido que la guerra "no es el medio para evitar gérmenes fanáticos que den lugar a células yihadistas", sino que es necesario una política europea de "defensa común" que cuente con el respaldo de la ONU porque "una respuesta global es más eficaz que acciones de cada Estado con visiones de corto plazo, tomadas en ocasiones al calor de decisiones electoralistas".
Urkullu ha realizado estas declaraciones en el pleno de control al Gobierno vasco que se celebra este viernes en el Parlamento vasco, en respuesta a una interpelación formulada por la secretaria general del PP vasco, Nerea Llanos, sobre el pacto antiyihadista.
La parlamentaria popular ha defendido que Euskadi "no se puede quedar al margen" en esta "respuesta de unidad" contra el terrorismo y cree que los vascos deben "ir de la mano, y hacerlo por encima de intereses y estrategias".
En este sentido, ha criticado "la poca disposición" del Gobierno vasco a participar en una "unidad política para rechazar el terrorismo y condenar la barbarie". "La sociedad nos lo está demandando estos días", ha insistido.
El lehendakari ha defendido que el Gobierno vasco está actuando "en todos los ámbitos" de su competencia contra el yihadismo radical en materia de prevención, seguridad, integración social, educación cooperación y solidaridad. "Conozco muy bien el texto del pacto antiyihadista y, por tanto, sé lo que estoy respondiendo en el ámbito de mis competencias", ha indicado.
Asimismo, ha hecho referencia a la reunión de coordinación de Seguridad en la que participó la Ertzaintza para calificarlo de "encuentro coyuntural" que espera que pase a tener carácter "estructural".
En este sentido, cree que el Gobierno central debe seguir dando pasos en esta línea y ha destacado "la importancia" de la presencia de la Ertzaintza en los foros de seguridad del espacio Schengen y la "relevancia" del acceso del a Ertzaintza a la fuentes de información de datos en materia de terrorismo internacional.
"Son medidas necesarias para garantizar la seguridad y nos gustaría contar con un nuevo espíritu de colaboración por parte del Gobierno español del PP para hacerlas efectivas", ha insistido.
Iñigo Urkullu ha citado los puntos 4,5, 6 y 7 del pacto antiyihadista porque cree que son los que "entroncan" con el ámbito de competencias del Gobierno vasco, y ha defendido que en el resto de puntos no tiene que responder en la decisión del PNV de no formar parte del mismo.
OPOSICIÓN A LA GUERRA
Al respecto, ha afirmado "con rotundidad" que "la guerra no es el medio para evitar gérmenes fanáticos que den lugar a células yihadistas". "He declarado mi oposición a la guerra", ha señalado antes de considerar necesario contar con una política europea de defensa común que cuente con el respaldo de la ONU porque "la experiencia demuestra que una respuesta global es más eficaz que acciones de cada Estado con visiones de corto plazo, tomadas, en ocasiones, al calor de decisiones electoralistas".
El lehendakari ha explicado que le transmitió al presidente del Gobierno central, Mariano Rajoy, la "disposición" del Gobierno vasco, al igual que a los "máximos representantes responsables de las formaciones políticas con representación parlamentaria, siendo Alfonso Alonso, presidente del PP vasco, el único que no le ha contestado.
Asimismo, ha señalado que Rajoy se comprometió a mantener la comunicación en función de los acontecimientos e iniciativas de carácter institucional que se fueran a plantear pero "hasta hoy".
Urkullu ha pedido "lealtad y no uso partidista" en este asunto y ha acusado al PP de pretender "arrogarse la legitimidad única en esta materia, pidiendo explicaciones al Gobierno vasco cuando conocen perfectamente nuestra posición institucional".
Finalmente, ha vuelto a reclamar al PP "lealtad y no uso partidista" porque espera que la "preocupación" del PP para que el Gobierno vasco adopte "medidas que eviten el fanatismo terrorista", incluya apoyar y fortalecer la capacidad propia de actuación, el acceso a las fuentes de terrorismo internacional, y dotar de carácter estructural el encuentro entre Policías internacionales, así como la convocatoria "urgente" de la Junta de Seguridad para la "acción entre los dos gobiernos".
