Álvaro Vadillo ha vuelto por sus fueros, o al menos así lo ha demostrado en estos dos últimos encuentros que bien le han valido una posibilidad única para demostrarle a Pepe Mel que aún tiene sitio en este equipo.
Los muchos y excelentes minutos coperos frente al Sporting y los últimos acumulado en el empate liguero frente al Celta han abierto la puerta de par en par de la continuidad, a pesar de que la salida era la única opción prevista hasta la fecha, aunque en ningún caso queda descartada. Pero Vadillo parece haberse sumado a la causa tras su fiasco del pasado verano con su frustrado traspaso al Rayo Vallecano y, sobre todo, tras tener la mente en mil cosas antes que en el propio Betis. Pero ahora, a poco más de veinte días para que el mercado invernal abra sus puertas, el de Puerto Real pretende cerrarlas para demostrarle al técnico madrileño que su deseo continúa siendo el de triunfar aquí.
Para ello, aún le restan tres nuevas oportunidades en las que deberá tomar el guante lanzado por el propio Mel tras el duelo Celta, en el que comentó que “así sí se queda con Vadillo”. Primero será frente a Las Palmas el próximo fin de semana, en el que probablemente volverá a sumar minutos para darle descanso a Joaquín de cara al derbi sevillano. Antes del mismo habrá Copa en Gijón, donde de nuevo será titular si las lesiones no se lo impiden. Y quizás el momento cumbre llegue contra el Sevilla en el Villamarín, partido en el que seguro querrá agradar a todos los allí presentes, incluido a una directiva que para quedarse a Vadillo tendrán que renovarlo estas Navidades.
