El secretario federal de Acción Política de IU, Ernesto Alba, ha lamentado este sábado el "juego de tronos" al que, en su opinión, se está jugando en el Congreso de los Diputados y que conlleva un bloqueo institucional desde el pasado 20 de diciembre. Así, ha insistido en que su formación únicamente apoyará una hipotética investidura del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, si se pone sobre la mesa un acuerdo programático centrado "en los problemas de la gente".
Así lo ha dicho durante su intervención en la reunión que la Coordinadora Federal de IU ha celebrado en su sede de Madrid para fijar la postura del partido ante el riesgo de unas terceras elecciones. La Coordinadora ha analizado y aprobado la 'declaración sobre coyuntura política' que el pasado miércoles anunció el coordinador federal de IU, Alberto Garzón, tras reunirse con Sánchez para "intercambiar puntos de vista sobra la actual situación".
"Es el momento de hablar claro a la gente", ha afirmado Alba en relación a la situación de bloqueo que "ni la gente entiende" y que, según ha aseverado, "genera cabreo y frustración". Por ello, ha instado a su formación a paralizar el "juego de tronos al que diferentes organizaciones políticas están jugando para hacer un paripé" que está desencadenando hacia el "desgaste político".
"Mientras que el PP piensa en Luis de Guindos y José Manuel Soria y el PSOE en Susana Díaz, Felipe González o Pedro Sánchez, ¿quién piensa en la gente?", ha enfatizado Alba. En este sentido, ha asegurado que IU tiene que "estar a la altura" de la situación, por lo que a su juicio, tiene la responsabilidad de "situar la Política en mayúsculas" y de incorporar al "espacio de las fuerzas del cambio" los procesos de movilizaciones sociales y acabar con la precariedad laboral, el desempleo y luchar por los derechos laborales, el derecho a la vivienda, entre otros.
Ha reconocido que es necesario el "diálogo sincero" para evitar que haya unas terceras elecciones y por ello ha insistido en que IU no va a vetar ninguna conversación, ya que es la mejor "herramienta" para salir de esta situación "absurda".
Así pues, ante la posibilidad de que el PSOE se presente, de nuevo, a la investidura, el responsable de Acción Política ha reiterado la posición que marcó Garzón el pasado miércoles y ha dicho que su partido dará el 'sí' siempre que haya "coherencia política, diálogo" y, sobre todo, propuestas programáticas centradas en los "problemas de la gente".
OBJETIVO: FRENAR AL PP
Es más, ha recalcado que el "máximo objetivo" es frenar al PP y que, para ello, en el Hemiciclo hay una mayoría parlamentaria de izquierdas, por lo que habría que buscar el apoyo o la abstención de estas fuerzas para conseguir este "máximo objetivo".
No obstante, ha hecho hincapié en que IU no comparte el proyecto político del PSOE, ya que, en su consideración, ha sido "copartícipe" de los recortes sociales y de reformas, como la del artículo 135 de la Constitución.
ELECCIONES VASCAS
Por último, ha tomado la palabra el candidato por Álava de Ezker Anitza-IU en las elecciones vascas, Íñigo Martínez, y ha criticado que el PNV se presente a los comicios del próximo 25 de septiembre con el "balance de la gestión en una legislatura gris". Según ha dicho, los factores microeconómicos del País Vasco destacan que está sucediendo en la comunidad "lo mismo que en el Estado español: que la desigualdad, la precariedad y el paro están avanzando".
Asimismo, ha explicado a la Coordinadora Federal que su proyecto político para la nueva legislatura en el País Vasco es un "proyecto federal, plurinacional y plurilingüe". Esto se basa en recuperar y convertir la industria en el sector principal del modelo económico y blindar los derechos sociales como la Sanidad, la Educación pública, los servicios sociales y la dependencia.
En cuanto al modelo territorial, IU quiere apostar por el cumplimiento del Estatuto de Autonomía de 1979, conocido como 'Estatuto de Gernika' y "superar el marco de la Transición". En tercer lugar, abogan por la "paz y convivencia", lo que conlleva el desarme "definitivo" de ETA y el "reconocimiento del dolor" de las víctimas.
