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El gasto energético en las casas sube un 1,5% de 2015 a 2016

Cádiz es la tercera provincia española con menor cantidad de media en el abono de recibos domésticos de luz, gas y otros combustibles

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  • Factura de electricidad -

Las familias gaditanas gastan de media unos 882 euros al año para pagar la energía, electricidad, gas y otros combustibles para uso doméstico, según un estudio sobre el gasto energético elaborado por la empresa Grupo AIS, a partir de los indicadores Habit Big Data referidos al pasado 2016.
Este estudio refleja así una subida de los costes eléctricos en los hogares de la provincia para estos suministros de un 1,6 por ciento con respecto a los 868 de media del año 2015.
Se trata de cifras inferiores a la media nacional, situada en 1.110 euros al año para abonar los mencionados servicios energéticos que incluyen la electricidad, gas y otros combustibles para su utilización en la vivienda.

También en comparación con el resto de provincias españolas, Cádiz ocupa la tercera posición en la lista de los territorios donde menos gastos de media existe en estos apartados.
De hecho, solo la superan las zonas de Santa Cruz de Tenerife, el lugar con menor coste en servicios energéticos para el hogar, con 663 euros de media al año en 2016, y Las Palmas, con 673 euros de media. Después de Cádiz se sitúa otro territorio andaluz, Almería, con un coste medio de 888 euros al año.

En cuanto a la electricidad, la media familiar española fue en 2015 de 720 euros, y en 2016 habría ascendido hasta los 732 euros.
Un aumento en los costes de la luz que, de cara al paso al 2017 ha sido muy criticado por distintos sectores sociales, entre otros.

De este modo, la Unión de Consumidores de Cádiz, a través de su presidente, Pedro Lázaro, quien calificó el alza del precio de este servicio básico como “muy grave”. Así, subrayó además a este diario “la indefensión que sufre el consumidor ante esta situación” ante este “asunto de legislación”. “Nosotros pensamos que  clama a la justicia y al cielo que un bien como es el de la energía eléctrica, indispensable para el hogar de todas las familias, tanto en época de frío como en época de calor,  para las necesidades de la alimentación y otras, esté sujeto a intereses de multinacionales y que se efectúen subidas desproporcionadas”, añadió.

En estas circunstancias, acusó al Gobierno Central de no pronunciarse “de ninguna manera” y demandó una mayor intervención estatal para este “servicio fundamental” no quede bajo los “intereses privados de las empresas y su margen de beneficios”, sino que se tenga en cuenta su característica como “servicio público”. Para Lázaro, tiene que haber una obligatoriedad por parte de las industrias de ir más allá de las medidas de impedir el corte del suministro para las familias que no puedan pagar la factura.
Si bien aún no hay datos estadísticos de la reciente subida de la luz, Lázaro detalló que en su caso personal ha pasado a pagar 55 euros más de diferencia en su última factura con respecto a la anterior.
Ante los argumentos expuestos, el presidente de UCA destacó que se están preparando una serie de campañas por parte de la asociación para hacer frente a este aumento del precio. Una parte de estas acciones se enfocará hacia las familias con menos recursos, y la otra a llevar el mensaje al Parlamento andaluz, además de que como asociación, manifiestan estar abiertos a otras entidades y organizaciones para llevar a cabo la defensa de una situación que, a su juicio, “no es de recibo para los ciudadanos”.

La subida de la luz, “doble palo” para los autónomos

La reciente subida en los gastos relacionados con el suministro eléctrico golpea doblemente a un sector que se enfrenta cotidianamente a adversidades de diversa índole como es el de los autónomos.
El presidente de la federación de autónomos ATA, en declaraciones a este diario, llegó a comentar que se trata de un “doble palo”. “Por un lado, no solamente lo que el autónomo tiene que asumir como consumidor y ciudadano en cuanto a los costes en su casa, sino también como usuario en el comercio, en la actividad, en el bar, en la oficina, el despacho o en la industria”, analizó.
Es más, detalló que “el repunte en la luz ha llevado a una inflación a un 3%”, lo que calificó como un peligro para la economía, para la competitividad y para el empleo, “y para los autónomos el tener una actividad inflacionista tan elevada”.

Evidentemente, hay autónomos para los que este concepto supone un coste “bastante elevado”. En áreas como las de las industrias, o la hostelería indica que influye de manera importante en los costes de producción. “Por tanto, cuando suben los precios energéticos, con un repunte tan elevado como en los últimos tiempos la verdad es que se nota, como cuando suben los carburantes, se nota en el sector de los transportes.
Igualmente, Amor matizó que es difícil de precisar el coste de esta subida, dado que este colectivo es muy heterogéneo.

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