La subdelegada del Gobierno, Francisca Molina, admitió ayer la preocupación por el incremento de las infracciones por conducción bajo los efectos de drogas ilegales. Así, de las 1.700 pruebas realizadas por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, el 30% dieron positivas. Sin embargo, en cuanto a la ingesta de alcohol sólo el 1% de las 73.000 pruebas de alcoholemia practicadas dieron positivas.
La Comisión Provincial de Tráfico y Seguridad de la Circulación se reunió ayer para hacer balance de los accidentes de tráfico en Jaén durante 2016. En la reunión se puso de relieve que las carreteras convencionales siguen siendo las vías donde fallece el mayor número de personas, el 85%, registrándose un total de 17 de los 20 fallecidos, habiendo mejorado, en cambio, la seguridad vial en las autovías, en las que se han registrado 3 víctimas mortales.
La siniestralidad en las carreteras de la provincia se mantiene en unos índices moderados, a pesar del repunte en el número de accidentes mortales que se produjo el año pasado en que hubo que lamentar la muerte de 20 personas, tres más que en 2015, la mayoría de ellas en carreteras convencionales. Unas cifras que continúan muy alejadas de las que se registraron hace una década cuando, en el año 2007, 55 personas perdieron la vida. Durante el pasado año se produjeron un total de 1.372 accidentes en las carreteras de Jaén, 158 más que el año anterior, de los que en la mayoría (967) sólo sufrieron daños los vehículos, mientras que en 384 hubo heridos y otros 19 fueron mortales, con 20 fallecidos. Y en las vías urbanas, se contabilizaron 2.320 siniestros, de ellos 7 mortales, con 8 personas fallecidas, 4 más que en 2015.
La Comisión Provincial de Tráfico puso de manifiesto que todavía son muchos los conductores que siguen sin utilizar el cinturón de seguridad, exponiéndose a un peligro real. Así, en 2016, seis de las personas fallecidas en vías interurbanas no hacían uso del dispositivo de seguridad en el momento del accidente. En concreto, la tercera parte de los conductores y pasajeros fallecidos no llevaba puesto el cinturón, lo que lleva al jefe provincial de Tráfico, Juan Diego Ramírez, a razonar que tal vez no habrían perdido la vida si hubieran viajado usándolo.