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Huelva

El vandalismo vuelve a azotar de noche el Parque Moret

Más de mil plantones de árboles destrozados en el vivero de ARBA-Huelva en el interior del recinto

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  • Destrozos -
  • Unos desconocidos acaban con bandejas repletas de diferentes tipos de plantas
  • ARBA-Huelva desiste de sus tareas en el vivero tras los continuos ataques
  • Entregarán las plantas que no han sido siniestradas para todo aquel que lo desee

El Parque Moret sigue siendo lamentablemente la diana de los actos de vandalismo de mayor importancia en la capital onubense.

El gamberrismo no cesa y las medidas de vigilancia no llegan. Esta segunda semana de marzo ha empezado con un nuevo ataque de unos desconocidos en la madrugada del lunes al vivero perteneciente a la Asociación para la Recuperación de Bosque Autóctono (ARBA-Huelva). Más de mil plantones de árboles han sido pateados, destruidos y estampados contra el suelo.

Eran árboles autóctonos como el tomillo carnoso, el pino, el acebuche, los palmitos y las higueras.  Bandejas forestales hechas añicos, donde se encontraban semillas y plantaciones que estaban germinando.

Este acto vandálico es el tercero del año que padece este vivero. Por ello, como ha adelantado el coordinador de ARBA-Huelva, José Carlos Mélida, a Viva Huelva, “esta asociación acaba en la capital.

No voy a seguir llevando las labores de reforestación del parque, de plantaciones y de mejoras al recinto porque todas mis ilusiones han muerto ya con este tercer atentado en el vivero en lo que va de 2017. Así no se puede seguir y se me han quitado las ganas. No quepo en mí de dolor y ya no sé cómo seguir adelante”.

Y es que desde ARBA-Huelva, así como desde la plataforma Parque Moret, reclamaron al Ayuntamiento de Huelva que incorporara más vigilancia. Sin embargo, este recinto “a partir de las 15.00 horas se convierte en una selva”, según Mélida, quien ha esgrimido que en este último ataque en su vivero se han destrozado “especies muy protegidas, como las variedades de tomillo, tan protegidas como puede estar un lince”.

ARBA-Huelva, por tanto, ha anunciado el cese de su actividad en el Parque Moret y se ha comprometido a regalar las bandejas de plantones de árboles que queden a aquel onubense que quiera tenerlo en su casa o finca.

Este será el último servicio de una asociación que ha contado con la participación de más de 700 escolares en este pasado año en la plantación de más de 5.000 especies.

En los últimos tiempos, el Parque Moret ha sido fruto de actos vandálicos como el incendio de la caseta-embarcadero, hurtos en los huertos,  destrozos del mobiliario y gamberradas de jóvenes disparando con pistolas de bolas.El Parque Moret sigue siendo lamentablemente la diana de los actos de vandalismo de mayor importancia en la capital onubense.

El gamberrismo no cesa y las medidas de vigilancia no llegan. Esta segunda semana de marzo ha empezado con un nuevo ataque de unos desconocidos en la madrugada del lunes al vivero perteneciente a la Asociación para la Recuperación de Bosque Autóctono (ARBA-Huelva). Más de mil plantones de árboles han sido pateados, destruidos y estampados contra el suelo.

Eran árboles autóctonos como el tomillo carnoso, el pino, el acebuche, los palmitos y las higueras.  Bandejas forestales hechas añicos, donde se encontraban semillas y plantaciones que estaban germinando.

Este acto vandálico es el tercero del año que padece este vivero. Por ello, como ha adelantado el coordinador de ARBA-Huelva, José Carlos Mélida, a Viva Huelva, “esta asociación acaba en la capital.

No voy a seguir llevando las labores de reforestación del parque, de plantaciones y de mejoras al recinto porque todas mis ilusiones han muerto ya con este tercer atentado en el vivero en lo que va de 2017. Así no se puede seguir y se me han quitado las ganas. No quepo en mí de dolor y ya no sé cómo seguir adelante”.

Y es que desde ARBA-Huelva, así como desde la plataforma Parque Moret, reclamaron al Ayuntamiento de Huelva que incorporara más vigilancia. Sin embargo, este recinto “a partir de las 15.00 horas se convierte en una selva”, según Mélida, quien ha esgrimido que en este último ataque en su vivero se han destrozado “especies muy protegidas, como las variedades de tomillo, tan protegidas como puede estar un lince”.

ARBA-Huelva, por tanto, ha anunciado el cese de su actividad en el Parque Moret y se ha comprometido a regalar las bandejas de plantones de árboles que queden a aquel onubense que quiera tenerlo en su casa o finca.

Este será el último servicio de una asociación que ha contado con la participación de más de 700 escolares en este pasado año en la plantación de más de 5.000 especies.

En los últimos tiempos, el Parque Moret ha sido fruto de actos vandálicos como el incendio de la caseta-embarcadero, hurtos en los huertos,  destrozos del mobiliario y gamberradas de jóvenes disparando con pistolas de bolas.

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