Un niño de unos 10 años ha sido rescatado por la Policía Local de Málaga del interior de un coche estacionado en un aparcamiento público, donde sus abuelos lo habían dejado para ir a ver el Museo Picasso, según han informado hoy a Efe fuentes policiales.
El niño, que estaba llorando, fue rescatado por los agentes, que tuvieron que romper un cristal para sacarlo del coche, después de que la Policía recibiera una llamada en la que alertaba de que había un menor que llevaba un rato solo en un vehículo estacionado.
Los hechos ocurrieron sobre las 11.00 horas de ayer en el aparcamiento municipal situado en la calle de Camas de la capital malagueña.
De la noticia da cuenta hoy el diario Sur, que señala que los agentes decidieron romper uno de los cristales del coche para atender al pequeño, que sudaba mucho y presentaba signos de deshidratación.
Aproximadamente una hora después se presentaron en el lugar los abuelos del niño, unos turistas franceses a los que los agentes les pidieron que les acompañaran a las oficinas del Servicio de Atención al Turista Extranjero (SATE) en busca de un intérprete.
Allí, la pareja, de unos 60 años, manifestó que había dejado a su nieto en el coche mientras iba a visitar el Museo Picasso, por lo que la Policía Local decidió abrir diligencias y remitir un oficio a la Fiscalía por si pudiera haber existido un delito de abandono temporal de un menor, según el periódico.