Izquierda Unida llamará a la movilización ciudadana “si no se constata voluntad política por parte del gobierno de Susana Díaz para terminar las obras de ampliación del Hospital Costa del Sol”, así lo ha anunciado esta mañana en rueda de prensa el Coordinador Provincial de la Formación, Guzmán Ahumada, acompañado del Coordinador Local, Miguel Díaz, y de la Secretaria Local de Acción Política, Victoria Morales.
“La paralización desde hace 7 años de las obras de ampliación del Hospital Costa de Sol constatan un doble fracaso y un perjudicado. El fracaso del gobierno de Susana Díaz, que no tiene proyecto político para Andalucía y el fracaso de la colaboración público-privada, que prima la segunda sobre la primera, siendo la ciudadanía la gravemente perjudicada”, ha subrayado Ahumada.
El Coordinador Provincial de IU, ha señalado que “queda constatado que no se podía supeditar la ampliación del hospital a los caprichos y la voluntad de la parte privada, y el resultado de ese procedimiento es una obra necesaria para ofrecer una sanidad de calidad a todos los habitantes de la Costa del Sol paralizada durante 7 años”.
Izquierda Unida quiere lanzar un “¡Basta ya!” ante esta situación y para ello ha lanzado dos iniciativas en el Parlamento de Andalucía. Por un lado, una pregunta parlamentaria con ruego de contestación escrita para conocer “en qué momento se encuentran las conversaciones con la empresa concesionaria” y saber “qué grado de compromiso tiene a Junta de Andalucía con los habitantes de la Costa del Sol” y, por otro, la formación ha presentado una enmienda directa “para poner negro sobre blanco los presupuestos de la Junta en relación a la ampliación del hospital”.
“Vamos a comprobar en este mes y medio que resta de 2017 si el compromiso de la Junta de Andalucía con la sanidad pública es una realidad o es una farsa”, ha advertido Ahumada, “dado que el anteproyecto de presupuestos elaborado por PSOE y Ciudadanos no contempla una partida para la ampliación del Costa del Sol”.
“Si comprobamos que no existe voluntad política, Izquierda Unida llamará a la movilización ciudadana para luchar en contra del total fracaso de la política del Partido Socialista y, con nombre propio, de Susana Díaz”, ha concluido Ahumada.
Una cronología
Por su parte, el Coordinador Local de la formación, Miguel Díaz, ha realizado una retrospectiva cronológica sobre las obras de ampliación del hospital comarcal, poniendo el acento en lo “insoportable” de esta situación.
En 2008 se firma el inicio de las obras por una concesión de la Junta de Andalucía con un presupuesto de 48,5 millones de euros, obras que 2 años después, en 2010, se paralizan.
“Se paralizan porque el gobierno municipal, entonces y ahora gestionado por la alcaldesa Ángeles Muñoz, niega a la empresa concesionaria la licencia para la construcción del parking, y así es como comenzamos esta situación de 7 años de parálisis”, se ha remontado Díaz.
Hasta 4 años después, en 2014, no se realiza ningún avance “en lo institucional, porque en la realidad, poner un ladrillo, las obras permanecen paralizadas”, cuando tras una campaña impulsada por Izquierda Unida y que recogió 16.000 firmas en toda la comarca, tres actores firman un acuerdo de continuidad de las obras, esto es el Ayuntamiento, que en su día no dio la licencia para la construcción del parking, la empresa concesionaria, que dejó los trabajos, y la Junta de Andalucía que en “ningún momento” tomó la iniciativa. “Se anunció a bombo y platillo que iban a desbloquear las obras en virtud de unos acuerdos para la utilización del aparcamiento, pero tres años después podemos constatar la realidad, no se ha hecho nada”, ha denunciado Díaz.
En 2016 hubo dos requerimientos de la Junta de Andalucía a la empresa, así lo anunció su consejero, para que reanudara las obras a riesgo de rescatar la concesión, un ultimátum que nunca se ha llegado a sustanciar y que ha llevado la situación a otro escenario. En abril de 2017, la concesionaria anuncia que entra en concurso voluntario de acreedores, por lo tanto, la empresa queda “fuera de juego”.
“La atención sanitaria de calidad, gratita y universal a los vecinos y vecinas queda supeditada a un negocio, de hecho, la propia consejería ha llegado a anunciar que ese acuerdo a tres bandas anunciado en 2014 no se ha podido materializar porque el banco que financiaba a la obra no quería, es decir, un banco no veía negocio en ese acuerdo que se firmó y, por tanto, nos quedamos todos sin hospital. Eso no puede ser, esto no es cumplir con el estatuto de autonomía, con un derecho fundamental, que interese o no a un banco la cuenta de resultados de la explotación de un aparcamiento”, ha criticado Díaz.
