El Gobierno y la oposición de Venezuela continuarán con el diálogo el próximo 15 de diciembre, tras dos días de prolongadas negociaciones en Santo Domingo que concluyeron con "significativos avances", según el presidente dominicano, Danilo Medina, aunque no se anunció ningún acuerdo.
Al término de la segunda jornada de conversaciones, Medina, anfitrión del diálogo, destacó que "se ha avanzado en profundidad" sobre los seis puntos de la agenda, y dijo que ambas partes "han reiterado la firme voluntad de avanzar en un acuerdo en interés del pueblo de Venezuela".
Para ello se volverán a reunir el próximo 15 de diciembre con el objetivo "de lograr un acuerdo definitivo", según Medina.
El presidente dominicano señaló que "como son dos sectores que tienen que hacer consultas, lo mejor es ir despacio para que las cosas salgan bien".
Las conversaciones tuvieron lugar ayer y hoy a puerta cerrada en la sede de la Cancillería, bajo el auspicio de Medina, y del expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.
Tras varios intentos fallidos de diálogo en los últimos años, el Gobierno y la oposición venezolana volvieron este fin de semana a la mesa de diálogo con Chile, México y Paraguay como observadores del proceso a instancia de la oposición, mientras que Bolivia, Nicaragua y San Vicente y Granadinas son los invitados por el Gobierno de Nicolás Maduro.
En declaraciones a la prensa, el ministro venezolano de Comunicación y Cultura, Jorge Rodríguez, que encabezó la delegación oficialista, dijo que se está cerca de lograr un acuerdo entre las partes.
Rodríguez reconoció la preocupación genuina de la oposición por las garantías electorales de cara a los comicios presidenciales del próximo año, pero consideró que lo más urgente es el cese del "bloqueo salvaje" contra su país, para poder dar respuestas a las necesidades de la población.
Por su parte, el presidente del Parlamento venezolano, el opositor Julio Borges, señaló que aunque el tema electoral "tiene una gran importancia, lo más urgente es la crisis de alimentos y medicinas".
La oposición exige unas garantías para las elecciones presidenciales del próximo año, ya que no confían en el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Asimismo, Borges insistió en reclamar la liberación de los presos políticos en su país y devolver las facultades constitucionales del Parlamento, de mayoría opositora.
Borges también apuntó que el proceso "es difícil, fuerte y duro, de debate y de confrontamos pero estamos acá porque estamos determinados a que esto abra una ruta al futuro y al porvenir de todos los venezolanos".
A este nuevo diálogo, la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) acude dividida, ya que hay líderes antichavistas como María Corina Machado o Antonio Ledezma que se oponen al diálogo por considerarlo una estrategia del Gobierno de Nicolás Maduro.
En declaraciones a la prensa antes del término de la reunión de hoy, el canciller chileno, Heraldo Muñoz, que participó como observador del diálogo, afirmó que se va "con moderado optimismo" y explicó que hay "un borrador que está siendo analizado por las partes y que será sometido a sus respectivas bases en consulta".
El canciller chileno dijo que cree que en este encuentro se ha avanzado "un paso significativo hacia un eventual acuerdo".
"No estamos allí todavía, pero veremos si es que este borrador constituye la base que nos permita cerrar un acuerdo en la próxima reunión", fijada para el próximo 15 de diciembre, que dijo creer "que sería definitiva".
Las negociaciones para un nuevo diálogo comenzaron el pasado 13 de septiembre en Santo Domingo y después de que quedaran en el aire durante varias semanas, ambas partes se volvieron a reunir el pasado 16 de noviembre y acordaron este nuevo encuentro y los puntos de la agenda.
