La Sección Tercera de la Audiencia de Málaga tiene previsto juzgar a partir de este próximo lunes a diez personas acusadas de blanquear dinero obtenido con el tráfico de drogas. La Fiscalía solicita que se le imponga a cada uno la pena de cinco años de prisión y multa en función de las cantidades supuestamente introducidas en el sistema económico legal.
Según las conclusiones iniciales del fiscal, varios de los acusados fueron condenados por tráfico de drogas y supuestamente "con el fin de introducir en el mercado financiero las ganancias obtenidas" con esa actividad ilícita realizaron varias operaciones, bien ellos mismos o a través de familiares, también acusados en este procedimiento.
La acusación pública sostiene, en su escrito provisional, al que ha tenido acceso Europa Press, que los procesados condenados por vender droga habrían contado para blanquear el dinero con la ayuda de familiares, de forma que estos figuraban en cuentas bancarias y adquirieron bienes "teniendo pleno conocimiento" de la procedencia delictiva del dinero.
En todos los casos, señala el ministerio fiscal, con la colaboración de estos familiares o parejas se pretendía "dificultar el conocimiento de la verdadera titularidad de los bienes", para lo que aprovechaban tanto no tener antecedentes penales como tener algún negocio.
Del estudio de los ingresos realizados en las cuentas bancarias y las viviendas adquiridas, en relación con el dinero percibido por rendimientos del trabajo, que en muchos casos era inferior y en algunos se limitaba a la prestación por desempleo, el fiscal extrae que supuestamente existen movimientos "sin cadencia lógica en cuanto a tiempo ni a cantidad".
Así, en el caso de dos de los procesados ya condenados por tráfico de drogas, que son matrimonio, además de acusarlos de blanquear, contaron supuestamente con los padres de ella para hacer ingresos o adquirir bienes, apuntando que los pagos que realizaron fueron algunos años superiores a los rendimientos netos, según entiende la Fiscalía.
En el caso de otro de los acusados, presuntamente contó, además de con sus propias operaciones, con la ayuda de su esposa, que también será juzgada, apareciendo como titular de varios vehículos; mientras que otro procesado condenado por tráfico de drogas supuestamente también realizó operaciones de blanqueo él mismo o a través de su mujer y sus tíos.
Por estos hechos, la Fiscalía acusa a estas diez personas por un delito de blanqueo de capitales, solicitando que se le imponga a cada uno la pena de cinco años de prisión y el pago de distintas cantidades de multa, que van desde los 54.000 a los 3,1 millones de euros.