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El Almería emergió de la expulsión de Razak

La presión constante en todo el campo y el orden defensivo sirvieron al Guadalajara para atenazar al Almería en la primera parte

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La expulsión de Razak Brimah, portero del Guadalajara, en el tiempo de descuento de la primera mitad, ayudó al Almería a sumar un punto (2-2) ante un aguerrido conjunto guadalajareño, que nunca le dejó jugar.

La presión constante en todo el campo y el orden defensivo sirvieron al Guadalajara para atenazar al Almería en la primera parte. Los de Javi Gracia tuvieron un par de ocasiones, pero se mostraban incapaces de horadar las compactas líneas moradas.

Sólo cuando algún balón encontraba a Soriano en la media punta eran los almerienses capaces de generar peligro. Los alcarreños esperaron sus oportunidades, que llegaron en varias jugadas aisladas.

Apenas cuarenta y cinco segundos le hizo falta al Guadalajara para abrir el marcador. Cuando los aficionados terminaban de tomar asiento y la zaga almeriense comenzaba a coger su sitio, Alvaro sacaba con maestría un golpe franco que Barral remataba a gol, por el centro de la portería.

Pasados diez minutos de juego, Falqué tuvo el empate cuando le llegó una balón en el segundo palo, peinado por Charles, que llegó a rematar, repeliendo Razak Brimah a córner.

La Unión Deportiva Almería había imprimido velocidad a sus acciones, y trataba de meter al Guadalajara en su campo. Los morados, concentrados atrás, se defendían con orden. Pero la pelota quemaba en los pies, y apenas duraba unos segundos en su poder. Y cuando el Almería se hacía dueño del balón, llegó el 2-0, obra de Azkorra, a gran pase de Cristian. El vizcaíno remachó en boca de gol, dentro del área pequeña.

A continuación, Charles erró una ocasión clarísima solo y a pocos metros de meta. Soriano le había cedido la bola atrás, después de una gran jugada de Falqué por banda.

Azkorra tuvo el tercero para el Guadalajara al filo del descanso. Erice le dio un pase raso al primer palo que el vasco llegó a empalar. Esteban hizo una gran parada.

En el tiempo añadido de la primera mitad llegó la jugada determinante del partido. Razak golpeó la cabeza de Charles, quien trataba de robarle un balón que el ghanés tenía en sus manos.

Lesma López recorrió medio campo con la tarjeta roja en mano, y expulsó al cancerbero africano. Cristian Fernández dejó su puesto a Toño Ramírez, quien no pudo detener el penalti, lanzado por el propio Charles.

Con un hombre menos, y ante todo un Almería, no se echó atrás el Guadalajara en la reanudación. los morados continuaron firmes atrás, y sacando adelante una y otra jugada para alejar el peligro de su área.

Pasaban los minutos y los rojiblancos empujaban a su adversario. Carlos Calvo, recién ingresado al terreno de juego, estrellaba un balón en el larguero. En el bando local, Juanjo suplía a Azkorra para prolongar en la medida de lo posible la presión arriba.

Le costó al Almería, pero llegó el empate. Cristian entraba con todo y remachaba de cabeza, sobre la línea de gol, una pelota que no acertó a sujetar Toño Ramírez.

Con tablas en el luminoso, los andaluces parecieron conformarse y se estiró el equipo dirigido por Carlos Terrazas. Y pudo César Soriano dar los tres puntos al Guadalajara, al rematar un córner que repelió la zaga visitante bajo palos, pero al final hubo un punto para cada equipo en el Pedro Escartín y semana para la polémica, con la controvertida expulsión de Razak.

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