Los graves problemas económicos que han conducido al club racinguista a acogerse a la denominada Ley Concursal debido principalmente a no poder hacer frente a la gran deuda acumulada en los últimos años, no es algo anormal en estos tiempos que corren.

La crisis económica y financiera mundial ha afectado de manera decisiva al futbol modesto, que estaba principalmente sostenido por promotores inmobiliarios que han dejado de invertir en el deporte rey.

Salvo escasas excepciones, la gran mayoría de los equipos tienen dificultades para llegar a fin de mes, y el Puerto Real es uno de los clubes que está sufriendo desde el comienzo de la temporada problemas de pago.

Así, los jugadores puertorrealeños han llegado a acumular hasta cuatro meses y medio de retraso en el pago de las nóminas.

Por suerte para los profesionales verdiblancos, poco antes de las navidades han comenzaron a recibir al menos una nómina de la adeudadas y el club se ha comprometido a pagarles en los próximos días alguna cantidad más.

Sin embargo, en todo este tiempo, la plantilla ha hecho gala de una enorme profesionalidad puesto que a pesar de no cobrar ha demostrado una excelente profesionalidad y entereza.