El último atentado de ETA y la crisis económica que afecta a la sociedad marcaron el discurso conmemorativo del 4 de diciembre de 1977, ofrecido ayer por el alcalde en el Museo Histórico Municipal. Un discurso donde el alcalde isleño, Manuel María de Bernardo, apeló a la libertad de los andaluces y por ello, en defensa de la libertad, pidió “compartir nuestro recuerdo emocionado a Ignacio Uría Mendizabal”, la última víctima de la banda terrorista.
Por eso De Bernardo apeló a “la unidad para que el estado de derecho pueda castigar a los asesinos”. El primer edil habló de las aspiraciones de los andaluces y del significado del 4 D, por eso, también tuvo su recuerdo Manuel García Caparros, muerto de un disparo en la jornada reivindicativa.
El alcalde valoró la sabiduría del pueblo andaluz y cómo se hicieron realidad los deseos, sentimientos y aspiraciones fraguadas sobre siglos de historia. Además habló de las “muestras de sabiduría de un pueblo cultivadas desde hace siglos con la fuerza de la razón”.
Cambiar la realidad
De Bernardo declaró que “la realidad de Andalucía es muy distinta a la que vio Blas Infante”, pero también añadió que “es posible cambiar la realidad si actuamos unidos”.
Pero todo no eran halagos, porque no faltaron también la críticas hacia el desarrollo del Estatuto de Autonomía. Así, el alcalde aseguró que “de nada sirve el texto estatutario si no se desarrolla en todos y cada uno de sus artículos”.
En su alocución, De Bernardo manifestó que “en Andalucía no debe haber lugar a la desilusión o disconformismo” y ahí se detuvo para hablar de la crisis económica que afecta a las familias españolas. El alcalde pidió un esfuerzo al Gobierno para paliar los efectos de la crisis y especialmente el paro. Habló de la dificultad de las familias y del enorme impacto del paro. Por eso animó a “exigirnos trabajar sin fin para salir de la situación”.
Acto de la constitución
Tras el acto del 4-D, esta tarde, a las 19.00 horas, tendrá lugar el acto institucional del Día de la Constitución en el salón de actos de la Casa de la Cultura.