La menor había sido vista por última vez a las cinco de la tarde del día anterior en la barriada sevillana de Martínez Montañés, situada en la zona deprimida de las Tres Mil Viviendas, y ya estaba siendo buscada por un grupo de vecinos, organizados para la ocación, y por la Policía de Sevilla.
Natalia Hurtado García, de 37 años y madre de la menor, había asegurado en declaraciones que su hija no tiene ningún motivo para haberse marchado sin avisar ni es una niña problemática o conflictiva.
Los vecinos en la búsqueda
Un grupo de vecinos de las Tres Mil Viviendas buscó a la menor por el barrio durante la mañana de la jornada de ayer y, a partir del mediodía, se concentró en un bar del barrio en espera de noticias y para recibir a los periodistas que se desplazaron al lugar para interesarse por el caso y a los que les mostraron un retrato de la desaparecida, para su mayor difusión y una búsqueda más eficaz.
La menor vivía con su abuela materna en el conflictivo barrio sevillano, con la cual, según aseguró su madre en declaraciones a Efe, se llevaba bien, y no había discutido tampoco con nadie de la familia, de manera que pudiera explicar que se hubiera escapado.
Un portavoz policial aseguró que, nada más efectuar la denuncia de la desaparición, se había activado el protocolo de desaparición de menores, para comenzar con la búsqueda lo antes posible.