Según han informado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil, el ahora fallecido, ex propietario del Camping El Pozuelo de Almuñécar, quería que su inquilino, que conocía desde hacía años, se marchara de su casa y puso "varias denuncias" para lograrlo. En la última, Henri consiguió que un juzgado le diera la razón e impuso para Gunter una orden de alejamiento.
El asunto "no sentó bien" al alemán, que decidió presuntamente matar a la persona que le había dado cobijo y trabajo en años anteriores. Así, el pasado viernes 1 de octubre, sobre las 16,00 horas, éste cogió una barra de hierro y agredió en la cabeza a Henri en el propio jardín de su casa, en Almuñécar, donde ambos residían desde hacía años. El anciano falleció poco después en el Hospital de Traumatología de Granada.
Según avanza en su edición de este martes el diario 'Ideal' de Granada, Henri había empleado a Gunter en el camping del que era propietario y cuando cerró sus instalaciones acogió al alemán en el jardín de su casa, ofreciéndole una paga a cambio de que realizara algunas tareas, como el cuidado de sus pájaros, unos loros guacamayos.
Gunter ocupó el jardín durante una década y hace cuatro años Henri decidió retirarle su asignación y que Gunter abandonara su propiedad, a lo que éste se negaba, lo que motivó que Henri presentara varias denuncias contra él por supuestas amenazas.
En su declaración ante el juez, según informa el rotativo, Gunter dijo no saber si estaba arrepentido o no por lo ocurrido aunque matizó que "se había quitado un peso de encima".