En la noche del viernes se vivió la segunda edición de la Noche Abierta del Comercio en el centro de la ciudad, iniciativa que congregó a mucha gente con el aliciente de la celebración de diversas actividades, sumándose a la apertura de los comercios hasta las doce de la noche.
Las calles del casco histórico vivieron un ambiente poco habitual en cualquier noche de un viernes, pero las ofertas en la mayoría de los comercios que sí se apuntaron a la iniciativa eran un caramelo bastante apetitoso, más aún ante la cercanía de las fiestas navideñas.
No obstante, el seguimiento que tuvo entre los comerciantes no fue el deseado ni por la Asociación de Comerciantes Cádiz Centro, organizadora del evento, ni por el Ayuntamiento gaditano, colaborador, aunque sí quedaron satisfechos y con el deseo de que en próximas ediciones sean más negocios los que se vayan sumando, y es que en algunas de las calles más céntricas apenas había algún comercio abierto.
Aún así, la mayoría de los que abrieron, se dieron por satisfechos, aunque unos pocos no tuvieron tanta suerte. Es el caso de Eutimio, que afirmó que se hicieron “pocas ventas”, aunque lo vio como una experiencia positiva ya que hubo “mucho movimiento de gente” por el centro, algo beneficioso para los pequeños comercios. Algo más satisfechos quedaron en María Vidal, donde aseguran que “tuvimos gente en la tienda hasta que cerramos a las doce de la noche, fue estupendo”. Pese a ello, aseguraban que está bien como una experiencia ocasional, “una o dos veces al año está bien”, pero no lo ven conveniente repetirla con mayor frecuencia.

Actividades
Muchos de los negocios presentaban oferta con importantes descuentos, lo que unido a las actividades programadas propició bastante movimiento de personas por el centro. Así, en el Palillero había conciertos, mientras que en el interior del Mercado Central, donde sólo unos pocos puestos permanecieron abierto, se habilitó una zona para celebrar un desfile de modelos que resultó de gran atractivo para los centenares de personas que allí se reunieron para presenciarlo.
En los descansos del desfile, presentado por la periodista Almudena de la Montaña, un grupo de jazz amenizaba con su buena música a los asistentes, que disfrutaron de una hermosa velada.