Arenas tiende la mano al Gobierno para trabajar juntos

El secretario general del PP-A, Javier Arenas, tendió ayer la mano al Gobierno de la Junta de Andalucía para trabajar, “juntos desde ya”, y “no perder el tiempo” hasta que se celebren las próximas elecciones municipales en mayo.

En declaraciones a los periodistas en Moguer (Huelva), en el que fue su primer acto de este nuevo año, Arenas deseó que 2011 “no sea una vez más un año perdido para Andalucía y España, hace falta un cambio de rumbo” y por ello ha ofrecido su colaboración al Gobierno andaluz.

Indicó el trabajo común ha de ir encaminado a sacar adelante la reforma de la administración pública, la reforma educativa que es “la más importante que necesita Andalucía”, una reforma fiscal que dé “tranquilidad y confianza” a los que pueden crear empleo y a los consumidores y por último la destinada a cambiar las políticas activas de empleo para más de un millón andaluces en el paro.

“Habrá pronto elecciones pero no podemos perder el tiempo hasta entonces, por eso ofrezco mano tendida y voluntad para trabajar en estas cuatro reformas que podrán traer a Andalucía y a España confianza”, insistió.

Y ello, indicó, lo propone cuando se afronta la que a su juicio es “la cuesta de enero más empinada de nuestra historia”, en la que a la subida de impuestos, los recortes sociales, las pensiones congeladas, la reducción de la inversión o el incremento del recibo de la luz, se suma la subida del IPC para todos, por lo que “volvemos a recuperar la inflación como problema nacional”.

Frente a esto, apostó por una política económica alternativa que pasa por “austeridad en los gobernantes y reformas profundas”, sin olvidarse de que en Andalucía hay 352.000 familias sin ingresos, y de que las ONG y los Ayuntamientos que les ayudan necesitan del apoyo del Gobierno andaluz.

En este sentido, pidió al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, que se reúna “urgentemente” con las ONG en Andalucía y con los Ayuntamientos y que cuanto antes diseñe “un plan especial de ayuda a éstos para atender a las familias sin ingresos”.

Con respecto a cómo afronta el PP-A las próximas municipales, indicó que “las encuestas y sondeos no nos vuelven locos, tenemos los pies en la tierra y sabemos que el PP en Andalucía va a tener más responsabilidad de la que nunca ha tenido en nuestra historia democrática”.

Ante ello, aseguró que “hay que responder trabajando más, todo el día en la calle, en el centro, con capacidad de diálogo y de oír a todos, defendiendo un andalucismo que significa, andalucismo en la españa de todos, andaluces y españoles sin complejos”.

Esa es la hoja de ruta del PP, apuntó, “obsesionados con los ciudadanos y todas nuestras políticas con un punto de influencia, la lucha contra el desempleo”, y destacó que “hoy estamos en condiciones de aspirar en todos los municipios y serán las próximas municipales el momento en que recibamos más apoyo de los ciudadanos de nuestra historia”.

También se refirió a la reunión que en breve mantendrá Griñán con el vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba y se preguntó “qué esperan ellos de ese encuentro”, ya que a su juicio el “cambio de rumbo radical” que necesitan España y Andalucía “no va a llegar de la mano de Rubalcaba, que es lo mismo de Zapatero ni de Griñán, que es lo mismo que Chaves”.

Griñán explica sus líneas de actuación

Mientras, el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, comparecerá ante los medios de comunicación este martes para dar a conocer las principales líneas de actuación del Gobierno andaluz ante el inicio del curso político 2011, después de que fuera la consejera de Presidencia y portavoz del Ejecutivo andaluz, Mar Moreno, la que se encargara de ofrecer el balance político del pasado año.

En aquella comparecencia, la consejera de Presidencia consideró que la crisis económica y el desempleo son los principales problemas de la sociedad y adelantó que el Gobierno andaluz prevé que 2011 se invierta la evolución de la economía de forma que se pase de la recesión y destrucción de puestos de trabajo actual a un crecimiento a “ritmo moderado” del empleo, un “camino que será lento” y que empezará a consolidarse a finales de año.