El tiempo en: Vélez-Málaga
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Costa Occidental

El acusado de matar a golpes a su compañero asegura que fue en defensa propia

Igualmente afirma en el juicio oral ante un jurado popular, que salió a buscar ayuda

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai

J.M.M.A., acusado de matar a A.E.C., tras golpearlo con una pala en una caseta situada en la localidad de Ayamonte, donde ambos convivían, después de mantener una discusión doméstica por motivos desconocidos en marzo de 2011, ha asegurado en su declaración en el juicio delante de un jurado popular, que actuó en defensa propia porque la víctima "le agredió" con anterioridad y que acudió a la Guardia Civil para "buscar ayuda y que los agentes intervinieran".

Durante la primera sesión del juicio ante el tribunal de la Sección Segunda en la Audiencia Provincial de Huelva, el acusado ha reconocido que le asestó "como máximo tres golpes y no diez" como revela la autopsia, según el fiscal, así como que ante la Guardia Civil no dijo que "le había matado, sino que habían discutido y que por miedo no podía volver a la caseta". En este punto, ha asegurado que se enteró de la muerte de la víctima "dos días después" por la Guardia Civil.

Del mismo modo, el acusado, nacido en Angola y según la acusación participó en la guerra civil de ese país, ha hecho hincapié en que ambos habían bebido y tras discutir (ya que la víctima "lo amenazaba continuamente"), ésta "le dio un golpe en el pecho y por suerte estaba allí la pala, con la que le golpeé".

Tras ello, J.M.M.A., que había conocido A.E.C., ocho meses antes del altercado y llevaban conviviendo tres semanas, ha manifestado que salió "en busca de ayuda en cuanto pudo, ya que antes me tenía acorralado", aunque ha asegurado que desconoce si cayó al suelo o en la cama porque "todo estaba a oscuras". Preguntado por la acusación si está arrepentido de los hechos, ha señalado que "no fui a matarlo, lo que quería era salir corriendo para pedir ayuda".

Cabe recordar que para el acusado la acusación particular ha solicitado la pena de 25 años por un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento y una indemnización para su madre de 123.000 euros; la defensa ha pedido dos años y medio de prisión con las atenuantes de la ingestión de alcohol tanto por parte de la víctima y del acusado y de haber estado en tratamiento durante varios años en un centro de drogodependencia por sus problemas con el alcohol, mientras que la Fiscalía pide 16 años y medio de prisión y una indemnización para su madre de 74.305,87 euros.

TESTIGOS

Por su parte, uno de los testigos, amigo de ambos, J.M.J.Q., ha señalado que tanto la víctima como el acusado "sin beber son de apreciar pero cuando beben dejan mucho que desear" y ha asegurado que J.M.M.A., "es muy agresivo cuando bebe alcohol", así como que ha presenciado discusiones verbales entre ambos.

La madre de la víctima también ha declarado como testigo y ha remarcado que era "muy trabajador, una bendición como hijo y se buscaba en la vida porque era un manitas", así como que era alcohólico pero no había tenido problemas con la justicia. Preguntada por si renuncia a la indemnización, ha señalado que no y que lo que quiere es "justicia" para su hijo.

La hermana de la víctima ha indicado que esta vino a Ayamonte porque fue a un centro de rehabilitación en Cartaya por su problema con el alcohol, así como que cuando bebía "no era violento". Así, ha pedido "la justicia máxima para su hermano", pero sin renunciar a la indemnización.

LOS HECHOS, SEGÚN EL FISCAL

El Ministerio Fiscal considera probado que sobre las 22,45 horas del día 31 de marzo de 2011 en una caseta situada detrás de un restaurante pizzería de la localidad de Ayamonte, el acusado, mayor de edad y habiendo sido condenado en sentencia firme a la pena de seis meses de prisión por un delito de robo con fuerza, sostuvo una discusión doméstica, por motivos desconocidos, con la víctima, con quien convivía en la caseta reseñada.

Según entiende la Fiscalía, el acusado entró en la habitación portando una pala metálica con la que, aprovechando que A.E.C., presentaba una elevada dosis de etanol en sangre, lo que provocaba una alteración importante de su estado de conciencia y una situación de especial vulnerabilidad, le golpeó de forma sorpresiva en la cabeza, cayendo éste sobre un camastro boca arriba, inconsciente, y una vez que se encontraba tumbado y sin ninguna posibilidad de defensa, el acusado le asestó múltiples golpes en la cabeza, ocasionándole severos traumatismos en la cara y cabeza que provocaron su fallecimiento.

Inmediatamente después de cometer estos hechos el acusado se dirigió voluntariamente al cuartel de la Guardia Civil de Ayamonte donde llegó gritando a los agentes "lo he matado, he sido yo, detenedme".

La segunda sesión del juicio continuará esta tarde a partir de las 17,00 horas y en la que está previsto que declaren guardias civiles testigos de los hechos.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN