La historia se repite una jornada más. El Real Jaén, al perder en Ceuta por 1-0, no está en el camino de optar a los puestos de privilegio. Ayer, en el ‘Alfonso Murube’, los jienenses demostraron, una vez más, que, en el aspecto atacante forman un equipo romo y nulo, sin iniciativa y sin profundidad para batir el portal rival.
Eso fue lo que ocurrió en tierras ceutíes, donde los blancos, -ayer de morados- perdieron ante el equipo caballa, con el tanto que anotó Javi Navarro (minuto 69), al rematar de cabeza un centro de Aarón, que se aprovechó de una indecisión del defensa Galera y el portero Tejera.
La primera parte que protagonizaron ambos equipos es para olvidar. Ni una sola jugada digna de mención. Ni un solo disparo a puerta, si exceptuamos algunos lanzamientos de falta, propiciaron los jugadores que deambulaban por el campo, más preocupados en destruir que en crear. Fue de pena esta primera parte. El juego, lento y cansino, espeso y poco vistoso, aburría al más optimista, ya que ninguno de los veintidós jugadores que estaban sobre el terreno de juego, ofreció nada destacable.
Cervera había sacrificado a Mena para dar entrada a Castellanos, colocando a Galera de lateral izquierdo, para que Calderón jugara en la medular, mientras que Álex García actuaba de exterior zurdo, como variaciones a las alineaciones anteriores, ya que en la parte de atrás, Moyano, era el lateral derecho, mientras que Castellanos y Espín cubrían la zona central de la defensa, mientras que en la medular se colocaban Íñigo Ros y Esparza, con Solabarrieta, por la derecha. Fernando, como hombre más adelantado, luchaba con la zaga caballa, que no le dio opción en ningún momento de provocar acciones de peligro para la integridad del marco defendido por Ponzo. El sevillano, sin embargo, (minuto 34), tuvo una clara oportunidad, pero no controló adecuadamente el esférico cuando estaba en una posición inmejorable para perforar el marco local. Los dos equipos tenían clara la idea de que el que marcara se llevaba el partido, y eso fue lo que ocurrió.
En la segunda mitad, el Ceuta, sin hacer nada del otro mundo, intentó llevar la iniciativa, pero los jienenses tenían el partido controlado para no pasar apuros y, por lo menos, llevarse un punto. Los de Carlos Orue propiciaron alguna jugada que solventó sin problemas la zaga jienense. Sin embargo, lo que no debió ocurrir, sucedió. Un fallo, por aquello del ‘tuya-mía’, ‘mía-tuya’, hizo que Galera y Tejera, el uno por el otro ‘la casa sin barrer’, dieran opción para que Aarón, que siguió con fe la trayectoria de la pelota, ofreciera un centro sobre Javi Navarro, para que anotara el tanto de la victoria caballa.
Fue un mazazo para los jienenses, máxime cuando eran sabedores que remontar el marcador era cosa poco más o menos que imposible. Lo intentaron, pero era un ‘querer y no poder’, a pesar de que Cervera adelantó líneas y, con Mena en el campo, colocó a Moyano como interior derecha, pero todo siguió igual hasta el final. Una semana más, el titular puede ser el mismo, ‘Sobresaliente en defensa, suspenso en ataque’, ya que el equipo blanco, que encaja pocos goles, se encuentra con el ‘hándicap’ de que en los tres últimos partidos no ha marcado ninguno. Esto hace que, los rivales, con un poco de suerte y no haciendo más que los jienenses, se queden con los puntos en juego impidiendo que el Real Jaén se acerque a los puestos de privilegio. Ahora, con casi un tercio de liga jugado, los blancos, con dieciséis puntos, están en la zona media de la tabla, a seis puntos del cuarto clasificado, el Melilla, y a ocho del líder, el Granada. Si miramos para la zona baja, el Real Jaén está a cinco puntos de los puestos de promoción y descenso que ocupan, con once puntos, el Sevilla Atlético y el Águilas, el rival de la próxima jornada en ‘La Victoria’.