Las tensas relaciones entre la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, y el alcalde de Cádiz, José María González, pasaron a mejor vida. La visita oficial, por primera vez, al Ayuntamiento gaditano ha dado sus frutos y ambas instituciones han cambiado el cristal con el que miraban para asegurar que la reunión de este miércoles ha sido “cordial, positiva, fructífera”. Unos apelativos que meses atrás habría sido imposible de escuchar. Este buen tono se vivió también en su intervención ante los medios de comunicación.
El alcalde gaditano ofrecía una “valoración positiva y cordial, donde hemos hablado de cosas concretas y sobretodo de soluciones”. González aseguró que “este Ayuntamiento y esta ciudad siempre tendrá las puertas abiertas”. Incluso matizó que “la reunión ha sabido a poco”, de ahí que ya hayan acordado dar seguimiento a los acuerdos en el “último trimestre del año”. El alcalde gaditano aseguraba que “creo firmemente que se están construyendo los mimbres necesarios para llegar a un cambio de rumbo y de dinámica en la relación de las dos administraciones”.
Asimismo, la presidenta andaluza agradecía el tono de la reunión porque tenemos que “ser capaces de desbloquear proyectos, con puntos de encuentro entre la Junta y el Ayuntamiento”. La titular del Gobierno andaluz se defendió del hecho de no haber visitado con anterioridad la Casa Consistorial gaditana. Según explicó “estoy visitando todos los ayuntamientos de Andalucía. Creo en el municipalismo como creo en la política local. Creo que tengo que estar cerca de los hombres y mujeres que en Andalucía están al frente de los consistorios”. De mayor o menor tamaño, de todos los colores políticos, por eso puedo decir que “en tres años soy la presidenta que más ayuntamientos ha visitado y más encuentros ha tenido”. No obstante, no ofreció ninguna razón de por qué no había visitado antes una de las ocho capitales de provincia de la comunidad autónoma andaluza.
Tanto su llegada como la del consejero de la Presidencia, Manuel Jiménez Barrios y el delegado de la Junta en Cádiz, Fernando López Gil, fue tensa. En la calle les esperaban miembros de la plataforma de parados y representantes de la Marea Blanca. La presidenta que accedió hasta la misma puerta del Consistorio en su coche oficial tuvo que oír cómo le gritaban “Fuera de Cádiz”. No obstante, señaló que “llevo viviendo” estas situaciones desde el primer día que “fui presidenta. Unas veces con más cariño otras con gritos. Quien viene a buscarme es que quiere que le escuche y no es la primera vez”. En la mayoría de esos casos, cuando ha venido a Cádiz, han sido trabajadores en procesos de conversión.
Durante la entrada de Jiménez Barrios y López Gil, el conocido como Ciudadano Lorenzo se saltaba las vallas de seguridad y era apartado del entorno por los agentes de la Policía Nacional, mientras que sus “compañeros de lucha” llegaban incluso a romper el cordón de seguridad.
Mientras tanto, ell portavoz del PSOE-A en el Parlamento andaluz, Mario Jiménez, ha confiado este miércoles en que la tranquilidad y el sosiego se instalen en la ciudad de Cádiz y no se den más episodios de "alteración del orden público", como lamentablemente se ve en varios plenos del Ayuntamiento por parte de algunas personas.
Mario Jiménez, que ha sido preguntado sobre el hecho de que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, haya sido increpada por un grupo de personas cuando ha llegado a la sede del Ayuntamiento de Cádiz para reunirse con el alcalde, José María González, ha manifestado en rueda de prensa que, lamentablemente, en el Pleno del Ayuntamiento, con mucha frecuencia, el alcalde suele ser increpado y, en ocasiones, ha habido que interrumpir la sesión plenaria y que desalojar a personas.
"No compartimos que eso ocurra y tiene que garantizarse que cuando las administraciones desarrollen su actividad tienen que poder hacerlo con absolutas garantías", según Jiménez.
GRUPOS
Ante la visita, el portavoz socialista, Fran González, ha manifestado que "el entendimiento entre administraciones nos benefician a todos los gaditanos y hoy hemos tenido una buena muestra de ello tras un encuentro en el que se han llegado a acuerdos sobre la futura ubicación de la Ciudad de la Justicia en los antiguos depósitos de Altadis; así como sobre otros asuntos relacionados con el Centro de Transferencia Empresarial que se situará en el Olivillo; o actuaciones en materia de empleo y vivienda".
Mientras tanto, desde el PP, lamentó el “uso torticero” que se ha realizado del protocolo municipal para recibir a la presidenta de la Junta de Andalucía en su visita institucional al Ayuntamiento de Cádiz, ya que solo se convocó para la misma a los portavoces de los grupos municipales y –en el último momento- se avisó para que acudieran todos los concejales que quisieran, “con la excusa de que los miembros del Grupo Socialista habían pedido estar todos en la recepción oficial”.
El portavoz popular, Ignacio Romaní, se disculpó ante la presidenta andaluza al no estar presentes los miembros de este grupo “que no habían sido invitados a la recepción oficial, como nos hubiera gustado”.
Romaní indicó que “es muy importante las formas en una visita de este tipo porque nuestro grupo es –además del mayoritario en representación de los gaditanos- el que durante muchos tiempo esperó una visita oficial de la presidenta Susana Díaz. Nosotros somos respetuosos con las instituciones y si desde Alcaldía nos dicen que solo pueden ir los portavoces así lo hacemos, pero nos parece lamentable que la visión que tuviera la presidenta es que, finalmente, estaban todos los concejales del gobierno, todos los socialistas y solo el portavoz del grupo popular. Es una muestra más de cómo maneja este gobierno las instituciones”.
