El Pleno de la Corporación ha aprobado hoy por unanimidad la Cuenta General de 2020. El teniente de alcalde del área Económica, José María Ayala, ha explicado que “ya son seis años consecutivos en los que todas las magnitudes económicas del Ayuntamiento se sitúan en positivo.
Entre ellas, se ha referido al remanente de tesorería, “que alcanzó su máximo negativo con el gobierno socialista, en 2009, cuando registró un déficit de 63,85 millones de euros. El equipo de gobierno ha conseguido que este parámetro tenga un resultado positivo en 5,56 millones de euros, en la liquidación de 2020”, según ha explicado el edil. El superávit presupuestario se ha situado en 20,17 millones, la estabilidad presupuestaria en 9,52 millones de euros y se ha conseguido un ahorro neto de 25 millones de euros.
Asimismo, ha indicado que es significativo el avance producido en relación al periodo medio de pago a proveedores, “que ha pasado de 1.492 días con el gobierno socialista en 2011 a 10 días, en el segundo trimestre de 2021”; esto es, una cifra muy por debajo de los 30 días que establece la ley, situándose el Ayuntamiento a la cabeza de las administraciones de España que menos tarda en pagar a sus proveedores.
Asimismo, hay que recordar que el Ayuntamiento de Estepona está al día en los pagos a las empresas y proveedores que prestan servicios al Ayuntamiento, habiendo abonado todos los servicios contratados y sin que existan deudas derivadas ni de este ejercicio ni de anteriores desde que este equipo de gobierno está al frente del Ayuntamiento.
El concejal ha resaltado de la Cuenta General de 2020 que “el Ayuntamiento ha conseguido sentar las bases de la recuperación económica. Estamos hablando de que se ha producido un cambio económico pasando de la ruina y la quiebra en la que los socialistas dejaron el Ayuntamiento en 2011 a la estabilidad, recuperación e inversión”. Así, ha subrayado que Estepona está a la cabeza, también, de la inversión pública por habitante en la provincia de Málaga.
El concejal ha comentado que “no debemos olvidar que en junio de 2011, el saldo bancario del Ayuntamiento no alcanzaba ni para pagar la nomina de los trabajadores municipales, situación que contrasta con la liquidez bancaria recogida en la Cuenta General de 2020, que asciende a más de 40 millones de euros, tras pagar la deuda heredada y abonar las inversiones realizadas.
El edil ha indicado que “lamentablemente” nos seguimos viendo obligados a hacer frente a “la mala gestión del anterior gobierno socialista”. Así, se ha referido a que ya se ha abonado más del 76% de la deuda de 304 millones de euros, heredada en junio de 2011, situándose este débito, a día de hoy, en 77 millones de euros. Se prevé que al final de este ejercicio 2021 quede reducido a 71 millones de euros y que al final del ejercicio económico 2022 sea de 50 millones de euros. “Es remarcable la gestión económica desarrollada para pagar esta deuda heredada, sin subir impuestos, solo con el uso responsable de los recursos económicos públicos. Y en un tiempo récord, ahorrando así importantes cantidades por el pago de intereses que devenga esta deuda”, ha agregado el edil, que ha reiterado que, cada día, el Ayuntamiento destina más de 60.000 euros a pagar esa deuda heredada.
Por último, ha indicado que el Ayuntamiento está al día de todas sus obligaciones legales con entidades supramunicipales encargadas del control de las cuentas del municipio: Cámara de Cuentas, Tribunal de Cuentas y Ministerio de Hacienda, demostrando así “la absoluta transparencia de la gestión económica de la economía local” y el cambio de actitud “frente a anteriores gobiernos que nunca la presentaron”. Se trata de la décima Cuenta General consecutiva que rinde la actual Corporación, que se remite en plazo y forma.