El Pino de los Mil Duros, un emblema natural que se encuentra en el Camino del Rocío de Hinojos, reconocido como Árbol Singular de Andalucía y cuya muerte certificó el Espacio Natural de Doñana el pasado septiembre, ha quedado inmortalizado al transformarse en una imagen de la Virgen del Rocío.
Una vez certificada su muerte, desde el Ayuntamiento de Hinojos se comenzó a trabajar en los diferentes usos que podría tener este árbol tras cumplir su ciclo vital y tras barajar varias posibilidades se optó por potenciar el simbolismo rociero del mismo, ya que solía ser lugar de descanso de las hermandades que transitan por ese camino.
De esta forma se decidió que en el tronco del pino se realizaría una talla de la Virgen del Rocío. El alcalde, Miguel Ángel Curiel, según han informado a Efe fuentes municipales, comenzó a buscar a quien pudiera hacer realidad ese objetivo encontrando a través de redes sociales al artista gallego Eugenia Linares, reconocido escultor a motosierra.
Tras llegar a un acuerdo con el artista este se desplazó a la localidad hinojera a finales del pasado abril y después de realizar los planos y determinar distintas cuestiones como la dirección de la imagen, comenzó el trabajo.
Han sido dos semanas dando forma a esa madera, tallando con su motosierra la imagen de unas de las advocaciones marianas con más devotos en el mundo.
Finalmente el pasado domingo, el Ayuntamiento de Hinojos presidido por el alcalde, junto a la Hermandad del Rocío de Hinojos, acudieron al acto de inauguración y bendición de la imagen.
Curiel, a través de sus redes sociales, ha agradecido el apoyo de su pueblo a esta iniciativa, así como el de la Hermandad de Hinojos y el trabajo del artista que "ha sido capaz de conquistar a todo un pueblo de Hinojos y al mundo Rociero".
"Espero haber conseguido el objetivo que nos propusimos hace algo más de un año y que no era otro que perpetuar nuestro pino más señero", ha indicado.
De esta forma el pino, convertido en imagen de la Virgen del Rocío, continuará en su lugar, esperando, como venía haciendo desde hacía más de 300 años, a las hermandades y miles de romeros que cada año transitan este camino para alcanzar la aldea del Rocío y participar en la romería.
