La unidad de rescate animal de 'Mujeres por Doñana' ha logrado capturar en el entorno de Doñana a un grupo de galgos abandonados, famélicos y con un estado de salud "lamentable", hasta el punto de que uno de ellos llevaba sobre su cuerpo 476 garrapatas.
En un principio, ha informado el colectivo en un comunicado, los animales que se encontraban en una zona de campo entre Chucena e Hinojos (Huelva), donde ellas desarrollan su actividad, eran "enormemente esquivos, aparecían y desaparecían una y otra vez".
Las voluntarias tuvieron que emplear cuatro días, con el incentivo de comida y agua, para atrapar a este grupo de tres perros cuyo estado han calificado de "demoledor: repletos de garrapatas, agotados y deshidratados".
Tras su captura fueron trasladados al Santuario Animal "Wendy Clements" de la localidad de Chucena donde durante unas jornadas fueron cuidados y alimentados, aunque lo más preocupante era la increíble parasitación por garrapatas de estos animales.
Especialmente, llamaba la atención un galgo de color blanco que a simple vista parecía gris porque el animal acarreaba en su cuerpo y especialmente en las orejas la cantidad de 476 garrapatas, muchas de ellas de un enorme tamaño, que "se estaban, literalmente, comiendo vivo al pobre galgo" y que las voluntarias le quitaron una a una.
El animal se encontraba estresado y desvitalizado por esta insoportable situación por lo que se procedió a un baño con productos sanitarios, protocolo que también se aplicó a sus compañeros.
Estas ecologistas consideran que estos abandonos masivos son "un efecto colateral de la inminente implantación de la nueva ley de Bienestar Animal".
En su opinión, la alarma despertada, sobre todo los entornos rurales donde aún quedan muchísimos perros sin contar con el microchip obligatorio, "está dando a lugar a que algunos propietarios decidan desprenderse de sus animales en muchos casos por el simple hecho de no disponer de dinero para regularizar a los perros, también muchos ellos tienen miedo de las sanciones que pueda acarrearles el tener animales sin identificar desde hace años".
Creen que es necesario que el Gobierno articule un periodo de "gracia" con apoyos veterinarios subvencionados, así como un poco de relajación legal durante su aplicación, para facilitar la regularización" ya que de lo contrario "la esperanza de un proyecto para el bienestar animal se acabará convirtiendo en una tragedia para miles de perros y gatos".