El sector turístico, ahora sí, es capaz de visualizar un futuro a corto-medio plazo en cuanto al comportamiento del mercado y la demanda de los viajeros, a medida que se avanza en todos los países, con más premura o más lentitud, en el proceso de vacunación de la población, y, a nivel nacional, el fin del estado de alarma y, en consecuencia, la libertad de movilidad entre comunidades autónomas.
Todos estos factores, ha afirmado el catedrático de Organización de Empresas de la Facultad de Ciencias Empresariales y Turismo en la Universidad de Huelva (UHU), Alfonso Vargas, en una entrevista para el espacio #DiálogosUHU, son absolutamente esenciales para el inicio de la recuperación de un sector, el turístico, que ha sufrido un estado de “hibernación, de pasar del todo a la nada con la irrupción del coronavirus, provocando serias dificultades para el tejido empresarial del turismo, y miles de empresas que se han visto obligadas a cerrar por la falta de ingresos”.
De este modo, tanto el fin del estado de alarma como el avance progresivo en las vacunaciones contra el Covid-19 permiten tanto a la sociedad como a las empresas a ganar tranquilidad y confianza, y por ello, Vargas señala que, de cara a este verano, “el efecto más verosímil es el llamado ‘efecto champán’, que se caracterizará por una demanda que, habiendo estado contenida, se desbordará inicialmente, llevándonos a puntas de demanda bastante fuertes durante algunos meses”, pero que luego “se verá aplacada, fruto de la crisis económica derivada de la sanitaria”.
Otro debate, destaca Alfonso Vargas, es el de “cuándo volveremos de nuevo a las cifras prepandemia del turismo, y según los estudios que podríamos considerar más plausibles, tendremos que esperar en torno a dos o tres años”. No obstante, recalca Vargas, “en este asunto no debemos pensar tanto en términos cuantitativos como cualitativos en relación a cómo van a responder los mercados y cómo será la demanda”.
Transformación necesaria y el papel de Huelva
Para el catedrático de Organización de Empresas de la Universidad de Huelva, en el nuevo horizonte que se vislumbra a medida que el SARS-CoV-2 sea derrotado, el sector turístico, a escala global, “necesita sin lugar a dudas una profunda transformación, no sólo para adaptarse a cómo será la respuesta de los mercados en el escenario post-pandemia, sino también, y de manera especial, volcarse con el proceso de digitalización y de modernización tecnológica, así como incidir en la apuesta por la sostenibilidad, de respeto a nuestro entorno, de lucha contra el cambio climático, valores tan importantes en los últimos tiempos y cada vez más considerados por los viajeros”.
En este sentido, Vargas ha querido subrayar el potencial que tiene la provincia de Huelva en el nuevo mapa turístico que se dibuja, y es que “parece claro que el turista busca, en general, reconectar con la naturaleza, tener un mayor contacto con los espacios naturales y, por ende, abiertos, que son los que dan más seguridad en estos tiempos”. Se trata de un aspecto en el que ha profundizado el catedrático de la Onubense en sus investigaciones en sus últimos meses. “Uno de los ganadores que me permito anticipar en el nuevo contexto postviral es el del turismo rural (ecoturismo, turismo de naturaleza…), y todos sabemos el potencial que tiene Huelva en este sentido”, con un tercio de su territorio protegido como espacio natural, a través de diferentes figuras legales”, erigiéndose, por tanto, como un “segmento por el que se debería apostar más decididamente”.
