En cualquier caso, tal y como estaba previsto, delegados de los sindicatos UGT, Comisiones Obreras (CC OO) y CSIF, junto a trabajadores municipales, protagonizaron ayer una concentración en la que participó cerca de un centenar de personas.
Además de reivindicar el abono de la paga extraordinaria, los empleados municipales exigieron el cumplimiento del convenio colectivo, en materia de subida de salarios.
El representante de UGT, Manuel Andrades, destacó que el equipo de Gobierno “amenaza con que no aplicará el convenio a partir del 1 de enero”. Mientras, los sindicatos “estamos dispuestos a sentarnos y llegar a un acuerdo sobre la subida salarial, porque se negocia este convenio desde hace más de 30 años”.
El de Los Barrios, añadió el sindicalista, “es el primer Ayuntamiento que habla de congelar salarios y no aplicar el convenio que ha firmado su propio equipo de gobierno, aunque en el momento de la firma, Ángeles Ariza no fue alcaldesa”.
Por tanto, en la negociación, “se pusieron de acuerdo las partes en representación del equipo de gobierno y las centrales sindicales y se llegó a un consenso sin presiones de ningún tipo”, apostilló Andrades.
Por su parte, el responsable de CC OO, Jesús Gutiérrez, incidió en el “incumplimiento convenio, porque la propuesta de Ariza es la de subir sólo un 0,3 % los salarios, olvidando la subida pactada en convenio, hace 10 meses por el mismo equipo de Gobierno, en el que ahora sólo falta Alonso Rojas”.
Sin embargo, “no quieren respetar la subida, establecida en un 2 % más 89 euros lineales por cada trabajador, en nómina”.
Por su parte, el sindicato CSIF incidió en las “graves consecuencias” de dejar sin efecto el convenio “y que se puedan perder derechos económicos ya adquiridos y ratificados con la firma de los mismos concejales que hoy día siguen gobernando”.
Según la central sindical, “es de poca seriedad que los miembros de un equipo de Gobierno que en su día firmaron parte de una mesa negociadora y que firmaron el actual convenio, en la cual se reconocieron los derechos económicos y sociales que les pertenecen a los empleados y empleadas dependientes de este consistorio, sean los que meses más tarde no quieran reconocerlo y por tanto aplicarlo perjudicando a multitud de trabajadores”.