La citación es para declarar por las incidencias de la concentración del día 19 de noviembre
El secretario general de la Federación de Servicios Públicos de la UGT en el Campo de Gibraltar, Manuel Andrades, solicita al alcalde de la ciudad, Tomás Herrera, que tome medidas en el asunto acaecido el pasado 23 de diciembre, cuando desde la inspección de Guardia de la Policía Local algecireña se le citó cía telefónica a que compareciera en las dependencias del citado cuerpo, a efectos de tomarle declaración por las incidencias ocurridas al día 19 de noviembre con motivo de la concentración llevada a cabo por el sindicato en cuestión y en la que participaron unos 150 agentes en señal de protesta por “las continuas provocaciones a las que están siendo sometidos miembros del cuerpo mediante expedientes disciplinarios injustos e injustificados, por parte de los señores que dirigen este cuerpo policial, como en tiempos franquistas”.
Desde el ente sindical se entiende que estos hechos vuelven a ser una nueva provocación, además de ser ilegal que se cite como antaño a un ciudadano o a dirigentes sindicales a declarar a unas dependencias policiales verbalmente, “cuando estos jefecillos de poca monta deben saber al menos, se lo enseñarían en la academia cuando se prepararon para ser jefecillos, que sus competencias son dar cuenta a quien corresponda, cuando las cosas no sean como establece la ley o se salgan los pies del plato, y no llamar a declarar a sus dependencias un mes después, entendemos y creemos que aquí hay algo que huele mal”.
Por tanto desde UGT exigen que de una vez por todas, se investiguen las actuaciones del intendente mayor y el superintendente, pues entienden que su forma de actuar no son las correctas en un estado democrático y de derecho, y se debe cesar a los mismos pues la forma en que actúan no es digna de elogiar.
Desde el sindicato quieren aclarar, para que la opinión pública sepa, que no ocurrió nada, que no hubo insultos ni amenazas, ni ningún tipo de incidentes, y que sólo pedían diálogo y solución a los problemas de estos trabajadores. “Pero a los jefecillos les molesta que se proteste contra su forma de actuar, no se han enterado todavía de que estamos en democracia y lo que hicimos y seguiremos haciendo, aunque a ellos les duela, es un derecho que recoge la Constitución, que si no cualquiera se movería en el seno de la Policía Local de la ciudad”.