Lola Rueda asumió la presidencia del Consejo Social de Jerez hace poco más de un año. Se trata de un órgano municipal consultivo creado con el objetivo de “poner en valor” la ciudad desde la participación altruista de sus integrantes. Cumplido un año al frente del organismo, hace balance de la labor desempeñada, de su tarea profesional dentro del mundo del emprendimiento, pero también de las barreras y reveses a los que se ha enfrentado en los últimos años.
De hecho, Rueda se considera una mujer que se ha “reinventado” con la crisis económica, que la dejó hace cinco años en las listas del paro, y reconoce que sobreponerse a ser “expulsada del mercado laboral con el conocimiento acumulado en 20 años de trayectoria profesional”, requiere de “una gran valentía, sobre todo si eres una mujer”.
“Aunque no soy una feminista declarada sé cuánto nos cuesta a las mujeres a diferencia de los hombres, sacar adelante nuestros proyectos”. Por ello, desde que perdió “un buen puesto” en el sector turístico con cuarenta y tantos años, decidió no quedarse “tranquila cobrando el desempleo” sino poner el foco en su próximo proyecto.
Fue entonces cuando “me sumergí en un mundo desconocido como era para mí las redes sociales”, recordaba la presidenta, “utilicé los recursos que existían en la provincia” como los cursos de la Cámara de Comercio y la Escuela de Negocios.
A su parecer, recursos hay para todo aquel interesado, “lo que ocurre que la mayoría de las personas se quedan quietas esperando que vayan a ofrecérselos”.
“Esta sociedad nos ha condicionado a esperar a que nos den” -lamenta la empresaria-, “a ir a por el trabajo seguro”, y a que cuando te quedas sin él “la solución es cobrar el subsidio”. “Eso es accesorio, lo principal es buscar tu siguiente proyecto”.
“Creo que cada individuo tiene la obligación de hacer” por la sociedad y que “nuestro talento tiene que ser activo”, opina la reconocida emprendedora.
“Las cosas han cambiado mucho”, son nuevas “competencias” las que demanda el mercado laboral, valora la presidenta del Consejo Social de Jerez, quien ha alentado a personas en su madurez profesional a que se adapten al uso de la tecnología, porque es , según su experiencia personal es “perfectamente posible”.
Más allá de las competencias digitales “hoy en día lo que buscan las empresas es a personas que estén dispuesta a dar mucho y no me refiero en horas de trabajo”. También que “sean buenas para trabajar en equipo” y sobre todo que “aporten valor a la organización”.
Según Rueda, para saber si una persona es válida para un puesto los reclutadores investigan al candidato, por ejemplo, “quieren saber qué haces en tu vida diaria, si tienes ideas de emprendimientos o participas en algún proyecto social”.
“Me preguntan cómo lo hice yo, como he pasado de estar en una situación de exclusión a tener una vida profesional tan prolífica”, ha reconocido, “lo he logrado gracias a la perseverancia” sin la cual “no es posible conseguir nada”, pero también “gracias al apoyo incondicional de mi pareja”.
Con un talante optimista, esta versátil empresaria, comunicadora y relaciones públicas afirma que su mayor fortaleza está en que “más allá de los problemas yo lo que veo son oportunidades”.
Cree que eso le ha ganado la confianza de la alcaldesa y del pleno de Jerez, que por unanimidad la designaron presidenta del Consejo Social de la Ciudad el año pasado. Ella aclara, no obstante, que “no soy política” sino “una dinamizadora” y una “impulsora del cambio”.
Esta profesional ha apostado por apoyar al talento “porque creo que la sociedad no puede permitirse dar la espalda al talento de tantas personas” ni debe “renunciar a tanto conocimiento acumulado” por años de experiencia.
Por ello, combina la presidencia del órgano asesor del ayuntamiento, con otros proyectos que forman parte de las “múltiples parcelas” que componen su vida, como su blog personal del cual surgió su asociación Mujeres Imparables.
El detonante del éxito del “hashtag” –etiqueta en inglés- ‘#MujeresImparables’, impreso más de un millón de veces en redes sociales, fue un artículo que Rueda escribió sobre mujeres talentosas que había conocido a lo largo de su trayectoria y que jamás fueron reconocidas. Lo tituló “Es tiempo de mujeres, es tiempo de cambio! #MujeresImparables”.
“El éxito de este hashtag evidenció la necesidad de un proyecto que visibilizará el trabajo de la mujer profesional, empresaria y emprendedora”, apuntaba Lola.
Cuando inauguró la asociación en Jerez en 2015 “el evento generó una gran expectación”; poco tiempo después “me llamaban de la Alcaldía para anunciarme que iba a recibir el Premio Ciudad de Jerez a la Iniciativa. “Me tomó por sorpresa porque no estoy acostumbrada a recibir palmaditas”.
Hace poco más de un año fue elegida por consenso para presidir el Consejo Social de Jerez, y dinamizar un ente que llevaba un par de años de inactividad porque es “una persona neutra, no política sino una profesional jerezana” y que según el ayuntamiento, “ha destacado en el ámbito de la comunicación, las relaciones públicas, el emprendimiento y el empleo”.
En el consejo ejecutivo celebrado este viernes los miembros han consensuado “nuevas acciones concretas que serán comunicadas en fechas próximas” ha adelantado la presidenta, quien sí ha confirmado que “a partir de ahora vamos a hacer actividades en la calle para que la ciudadanía conozca para qué sirve el Consejo Social y también qué nos pueden proponer ellos”.
Los 21 miembros que componen este órgano consultivo pertenecen a distintas entidades y organizaciones de ámbito social y económico, emiten informes sobre las materias que les competen que son propuestas no vinculantes para la administración. Trabajan de manera altruista, ha puntualizado Rueda, “nosotros no somos políticos sino profesionales que estamos asesorando al ayuntamiento de Jerez en distintas líneas de trabajo”.
“El Consejo va a trabajar mucho en las reflexiones sobre por qué Jerez está como está”, cuáles son las nuevas industrias y empresas emergentes y que necesidades tienen. De esta manera, “podremos trasladar a los planes de empleo de la Junta de Andalucía cuáles son las necesidades reales del mercado”.
Volviendo a su faceta de emprendedora, Rueda pone el énfasis en que centra su trabajo en poner en contacto a profesionales que son capaces de generar “muchas iniciativas y sinergias” mediante el “networking”. Y que ese es su objetivo como mentora, dar visibilidad al talento local y ponerlo al servicio de la comunidad. “Animo a las personas de la provincia de Cádiz a que muestren su talento, que se registren en plataformas que sirven a este fin”.
“Una de las plataformas más fuertes es Mujeres&Cía”, sólo para mujeres. Cada año lanzan su ranking ‘Las Top 100’ en el cual eligen cada año a las cien mujeres más influyentes de España, y este año Lola Rueda es la única gaditana nominada.
“Mi deseo es conseguir que el año que viene hayan muchas gaditanas más participando”. Por eso, la emprendedora anima a todas ellas, “si tienes una idea y no sabes cómo ponerla en marcha, acude a personas como yo” en busca de asesoría, “no renuncies porque tu talento es muy necesario”.
Además de la asociación Mujeres Imparables, Lola Rueda ha puesto en marcha otros proyectos como el Club de Embajadores de la Provincia de Cadiz, y Hacedores Cadiz -una plataforma para conectar profesionales relacionados con organizaciones sin ánimo de lucro-.
Este año ha liderado además dos lanzaderas de empleo en Rota a través de la Fundación Santa Maria La Real, con las que ha reciclado a profesionales y dotado de competencias que les han permitido “alcanzar unos niveles de inserción de casi un 70 por ciento”.