Minutos antes de conceder esta entrevista, el teléfono de
Maryana Kasiv, portavoz de
Maydan Málaga-Asociación Ucraniana en la Costa del Sol, no para de sonar. Son
muchos los que quieren ayudar al pueblo ucraniano tras la invasión de Rusia que comenzó hace casi un mes.
La Asociación Maydan de Málaga
nació en 2014 “como necesidad de
enviar ayuda al Este de Ucrania, de apoyar a las personas de allí”, explicó Kasiv en el programa
‘La Alcazaba’, de 7TV. En los años de la
crisis de Crimea trajeron a Málaga de vacaciones a diez niños cuyos padres murieron en la zona de conflicto o hicieron posible la rehabilitación de chicos heridos en la zona de conflicto. Hasta el 24 de febrero funcionaban como una asociación cultural que mostraba cómo son los ucranianos a la sociedad malagueña, pero todo cambió ese día y comenzó la oleada de solidaridad, que ha sorprendido “muchísimo” a esta comunidad.
En cifras, que van en aumento a diario, han enviado alrededor de
100 toneladas de ayuda humanitaria a la frontera con Ucrania y en
cuatro días recibieron 250 solicitudes de familias que querían acoger a los evacuados de esta “masacre”.
Las ayudas
Coordinados con el Ayuntamiento de Málaga, la Diputación y la Junta de Andalucía, Maydan ha puesto en marcha una
web para canalizar las ayudas de la ciudadanía malagueña al pueblo ucraniano.
“Ahora todo el mundo quiere ayudar, aportar su granito de arena, habrá un tope y eso empezará a bajar”, expresó.
Sin embargo, no toda la ayuda es necesaria.
“Lo que no se pide también es importante y es algo que luego tenemos que gestionar con asociaciones de aquí, como ropa de verano que no se va a mandar. Hay quienes hacen la compra de medicamentos, pero también
hay gente que hace limpieza en su casa y nos trae medicamentos caducados del 99, alimentos caducados, ropa en mal estado que hay que tirar”. Kasiv insistió: “Nuestro país, que estaba desarrollándose en los últimos años, estaba mejorando su infraestructura, nos consideramos europeos,
no somos tercermundistas”, afirmó.
Al material sanitario, la portavoz hace un llamamiento para conseguir
Celox, que detiene las hemorragias. “Aceptamos también donaciones para comprar grandes unidades. En nuestra página de Facebook está nuestro número de cuenta para poder aportar. Hay quien pone en concepto medicamentos o transportes porque
también hay que tener en cuenta que hay que asumir el gasto de tener que llevar la carga hasta Ucrania o Polonia”, recuerda.
Aquí y allí
Hace una semana llegó a Málaga el autobús fletado por el empresario malagueño Vicente Jiménez Ifergan con 47 ucranianos a bordo que huían del horror que vive su país. ¿Qué pasará con estas personas? “Por parte de las administraciones se habla de escolarizar, son lentas, pero están trabajando.
Son personas evacuadas, no refugiadas, y se habla de un asilo temporal. La esperanza es que todo termine y que muchas mujeres con niños que tienen a sus maridos, hermanos, en el frente puedan volver. Esperan que sea algo temporal”, explicó.
Residente en Málaga desde hace 15 años, volvió cuatro días antes de que comenzase la guerra “porque mi madre me lo pidió”. Estuvo también en octubre del año pasado, “cuando la gente no creía tanto en ello. No puedo decir que había mucho miedo”, afirmó.
Con muy poco tiempo para ver las noticias, aprovecha para no ver las imágenes de guerra, “que son horribles”, sino también
cosas más positivas. Reconoció, asimismo, que, en un principio, “el pueblo ucraniano sentíamos ese miedo, impotencia, pero cuando vimos que están resistiendo los soldados, ese miedo e impotencia del pueblo ucraniano se ha acabado convirtiendo en
orgullo”.
También tuvo palabras para
Vladimir Putin, a quien calificó de
“ese psicópata que está en el Gobierno”. Sobre los ciudadanos rusos con los que mantiene el contacto reconoció que “muchos evitan hablar, muchos defienden a Ucrania, otros piden perdón...” A los que no, lanzó un mensaje: “Si sintiesen ese dolor que hay... Muchos tienen familiares en Ucrania, mantienen el contacto, saben lo que está pasando, pero prefieren ir en modo zombi y ver las noticias de canales del Gobierno de Rusia".