Tres años más tarde han vuelto a entrar por la puerta grande en la
Primera División Nacional del Fútbol Sala. Precisamente en una temporada que iniciaron con muchos cambios y ausencias, y que el propio entrenador Manuel Luiggi Moli denominó en septiembre de “transición”, con el objetivo de compactar al equipo y aprender a jugar juntos; el objetivo se difuminó en la segunda parte de la campaña, cuando los antequeranos empezaron a funcionar como una máquina bien engrasada.
De este modo,
un 19 de abril de 2015 el Argüelles abrió una página novedosa en su historia con un ascenso a Primera frente al Valdepeñas. El 1 de junio de 2018 se reeditó un episodio inmejorable con un salto de nuevo al primer escalón del fútbol sala nacional para disfrutar un poco más que el primer asalto, que fue de una sola temporada.
Fue
el Betis la víctima de un CD UMA Antequera que con Nacho Caballero abrió la inspiración verde en una noche destinada al triunfo. El ala malagueño brilló en el 2-0 de Dani Ramos y Juanra acercó la gesta ante un conjunto visitante muy luchador. Raúl Gómez otorgó algunas esperanzas que eliminó Cala en el último minuto de partido (4-1).
La fiesta se apoderó del feudo antequerano y la Ciudad de Los Dólmenes, junto a Málaga y Andalucía, tendrá un nuevo club en la División de Honor.
El Argüelles rugió como se esperaba. El público nunca deja de acompañar a su equipo y le apoyó en una noche mágica. Los universitarios salieron desde el principio con el hambre de encauzar cuanto antes el rumbo a la máxima categoría.
Conejo mandó fuera varios tiros desde su propio marco. Ivi estrelló el balón en el larguero a falta de un solo minuto.
El público se levantó de sus asientos para cobijar a sus chicos y acercarles a cumplir un sueño irrepetible.
“Ha sido un año difícil en general, porque había muchos rivales muy buenos y
la liga ha estado muy competida”, explicó tras el encuentro el portero Antonio Conejo, que insistió en que “hemos luchado y lo hemos dado todo. La afición ha estado de diez y estoy seguro de que todos juntos soñaremos en Primera. Ya que subir es un sueño hecho realidad. Ahora tenemos que disfrutar de nuevo en la máxima categoría y mantenernos”.
“Lo merecimos por el equipo, por la lucha, por la
humildad y la competitividad y sobre todo por esta afición que llena el pabellón y nos lleva en volandas. Los jugadores han demostrado que tenían ganas de volver a estar en la mejor Liga del mundo”, afirmó el técnico del CD UMA Antequera, Manuel Luiggi Moli, tras finalizar el segundo encuentro con el Real Betis FS.