Los guardias civiles Carlos Sáenz de Tejada García y Diego Salva Lesaun han sido las últimas víctimas mortales de la banda terrorista
El jefe de brigada de la policía francesa fallecido esta noche en un tiroteo en Dammarie-les-Lys, en el sureste de París, es el primer miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad franceses que muere a manos de ETA y la duodécima víctima de la banda terrorista desde que diera por finalizada la tregua en junio de 2007.
No obstante, el 30 de diciembre de 2006 ETA volvía a asesinar tras colocar una furgoneta bomba en el aparcamiento de la Terminal 4 del aeropuerto madrileño de Barajas, acabando con la vida a los ciudadanos ecuatorianos Diego Armando Estacio Sivisapa, de 19 años, y de Carlos Alonso Palate, de 35. Fue el primer atentado tras la tregua que la banda terrorista hizo efectiva el 24 de marzo de 2006, después de un anuncio realizado 48 horas antes.
El atentado en Francia de anoche se produce ocho meses después de que, el 30 de julio de 2009, la banda terrorista asesinara a los guardias civiles Carlos Sáenz de Tejada García y Diego Salva Lesaun, de 28 y 27 años respectivamente, frente a un cuartel de la Guardia Civil en Palmanova, en el municipio mallorquín de Calvià. ETA colocó una bomba-lapa en los bajos del coche patrulla de los agentes y accionó el mecanismo a distancia.
El 19 de junio de 2009, el inspector de Policía Nacional Eduardo Antonio Puelles García, destinado a la Brigada de Información, y residente en Arrigorriaga, falleció tras la explosión de su vehículo, en el que la banda terrorista había colocado una bomba lapa, compuesta por entre kilo y medio y dos kilos de explosivo y colocada junto al depósito de combustible de su coche. Era el primer atentado desde con el socialista Patxi López en la Lehendakaritza.
El empresario Ignacio Uria Mendizabal, de 71 años de edad, fue la anterior víctima que dejó la banda terrorista ETA. Uria, dueño de una de las constructoras de la 'Y' vasca fue tiroteado el 3 de diciembre de 2008 en Azpeitia cuando se dirigía al restaurante Kiruri, al que solía acudir diariamente.
El brigada del Ejército de Tierra Luis Conde de la Cruz murió el 22 de septiembre del pasado año en la explosión de un coche-bomba en las inmediaciones del Patronato Militar de Santoña (Cantabria). El coche, robado y preparado por los pistoleros en Francia y con unos 100 kilos de explosivos, causó varios heridos.
El guardia civil Juan Manuel Piñuel Villalón, de 41 años, se convirtió en la segunda víctima mortal de la organización terrorista en 2008. Murió en la explosión de un coche bomba el 14 de mayo del pasado año.
El 7 de marzo de 2008, dos días antes de las elecciones generales, el ex concejal del PSE-EE en el término guipuzcoano de Arrasate-Mondragón Isaías Carrasco, de 43 años de edad, perdió la vida después de recibir varios disparos el 7 de marzo de 2008. Fue tiroteado en portal de su casa en presencia de su esposa y de una de sus hijas.
Al finalizar el año 2007, los agentes de la Guardia Civil Fernando Trapero y Raúl Centeno fueron tiroteados en la localidad francesa de Capbretón. El 1 de diciembre de aquel año, tres etarras les acribillaron a balazos causando la muerte en el acto de Centeno, mientras que Trapero falleció en el hospital cinco días después.