Periodistas del Sunday Times graban con cámara oculta al popular Pablo Zalba haciéndose pasar por representantes de un lobby
El eurodiputado popular Pablo Zalba Bidegain acordó retocar una directiva comunitaria destinada a proteger a los consumidores europeos siguiendo las peticiones de un grupo falso de presión, según revela hoy el dominical "The Sunday Times", que afirma que esta conversación fue grabada en secreto.
Según el rotativo británico, Zalba es el cuarto eurodiputado que figura en el caso denominado "dinero por leyes" destapado la semana pasada por "The Sunday Times".
El mes pasado, Zalba presentó una enmienda utilizando las mismas palabras redactadas por los periodistas encubiertos del dominical, que se hicieron pasar por un grupo de presión cuando se encontraron con él en su oficina de Estrasburgo (Francia), agrega el dominical.
Los periodistas le hicieron saber al eurodiputado español que se le pagaría por el trabajo, dice el periódico, que publica hoy extractos de la conversación grabada en secreto.
La enmienda del eurodiputado popular aparece en los documentos oficiales del Parlamento y puede convertirse en ley.
Tres eurodiputados son investigados en sus respectivos países después de aceptar una oferta de dinero a cambio de enmendar leyes.
Se trata del austríaco Ernst Strasser, el eslovaco Zoran Thaler y el rumano Adrian Severin, afirma "The Sunday Times".
Según el dominical británico, Zalba, de 36 años, fue uno de los catorce eurodiputados que mantuvieron reuniones con periodistas encubiertos durante los meses del pasado invierno boreal.
Los periodistas le dijeron a Zalba que ellos eran de un grupo de presión con sede en Londres que querían contratar a un "socio dentro del Parlamento" para su consejo asesor que pudiera tener "influencia" en la legislación, dice el rotativo.
"The Sunday Times" señala que los periodistas le hicieron saber al eurodiputado popular que a los miembros del consejo se les pagaría unos 100.000 euros anuales y Zalba tenía dos semanas para pensar sobre la propuesta hecha por el falso grupo de presión.
Según informa el periódico, los abogados de Zalba han indicado que él nunca indicó que estuviera dispuesto a aceptar la oferta de empleo del grupo y que presentó la enmienda porque le parecía una buena idea que mejoraría el borrador de la legislación y que no lo hacía por dinero.