Según informaron ayer a Efe fuentes municipales, en los pasquines colocados en las calles de este municipio figuraba también el nombre de este vecino, que causó daños en la sede de la izquierda abertzale después de que su vivienda sufriera también desperfectos tras la explosión el lunes de una bomba de ETA colocada ante la Casa del Pueblo.
En las pancartas también aparecen los lemas “fascista” y “8 años de cárcel” y se hacía un llamamiento a participar en una manifestación que recorrió Lazkao por la tarde. Las mismas fuentes señalaron que el hombre, que no es afiliado socialista, se ha ido fuera de Lazkao, aunque no precisaron el lugar en el que se encuentra.
Los hechos sucedieron el martes sobre las 12.30 horas, poco después de la concentración de condena por el atentado de ETA celebrada ante el Ayuntamiento, cuando este hombre se acercó a la herriko taberna de Lazkao provisto con una maza y causó importantes daños tanto en el exterior como en el interior del local.
El varón fue detenido por la Ertzaintza, aunque quedó después en libertad a la espera de pasar a disposición judicial.
Reacciones
Representantes del Partido Socialista, el PP y el PNV mostraron su comprensión hacia el joven que atacó la herriko taberna, aunque ninguno de ellos justifica o comparte la acción.
En Euskadi, los máximos dirigentes del PSE/EE y el PP, Patxi López y Antonio Basagoiti, se pronunciaron sobre estos hechos, protagonizados por Emilio Gutiérrez, hijo del ex edil socialista de Lazkao Lucio Gutiérrez.
Patxi López dijo que no comparte “la reacción del ojo por ojo” que tuvo Gutiérrez “porque se entraría en una espiral de violencia permanente y absolutamente insoportable”.
El secretario general del PSE/EE de Guipúzcoa, Iñaki Arriola, señaló, por su parte, que el ataque no se puede “justificar”, aunque las personas “normales” lo pueden “entender”.
El presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, indicó que comprende “humanamente” al joven, aunque aseguró que él no lo habría hecho, y le ofreció la asistencia jurídica del PP “si la necesita”.
También hablaron desde Madrid los portavoces parlamentarios del PSOE y el PP, José Antonio Alonso y Soraya Sáenz de Santamaría, así como los del PSOE y del PNV en la Comisión de Justicia del Congreso, Julio Villarrubia y Emilio Olabarria.
Alonso dijo comprender “humanamente” la “hartura” de muchos ciudadanos ante el comportamiento de ETA y su entorno, y el ambiente en el que viven, pero advirtió de que la reacción del joven “no es la vía”, porque los demócratas se caracterizan por respetar los derechos de todos, incluidos los de los violentos.
Sáenz de Santamaría aseguró que comprende “perfectamente” a Emilio Gutiérrez y, aunque admitió que jurídicamente puede ser un acto “reprochable”, juzgó que “también hay que ser muy valiente para hacerlo”.
El diputado del PNV Emilio Olabarria comparte la opinión de que este tipo de reacciones no son razonables, pero indicó que “la violencia es algo insoportable muchas veces”.
